Los padres que organizaron un montaje haciendo creer que su hijo de seis años voló a la deriva en un globo aerostático casero para hacerse famosos recibieron ayer penas de cárcel seguidas de cuatro años de libertad condicional, durante los que no podrán obtener ingresos contando su "proeza".

Richard Heene fue condenado a 90 días de cárcel, mientras que su esposa, Mayumi, recibió una pena de 20 días, que cumplirá después de que su marido concluya la suya, para que sus tres hijos no queden desatendidos durante su estancia en prisión, dictaminó el juez del condado de Larimer, Stephen Schapanski.

Además, los Heene tendrán que pagar una multa para cubrir los gastos del operativo de rescate, que se han estimado en unos 46.000 dólares.

Asimismo , el juez estableció cuatro años de libertad condicional que, según advirtió, rescindirá en el caso de que los Heene quieran generar beneficios contando su historia en un libro, serie o programa de televisión.

Con lágrimas y palabras de disculpas Richard Heene escuchó la sentencia que tendrá que cumplir a partir del próximo 11 de enero. No obstante, el juez autorizó que Heene pase un mes en prisión y cumpla el resto de la pena en un régimen de libertad vigilada que le permita reincorporarse al trabajo e ir a la cárcel sólo a dormir. "Quiero reiterar que estoy muy, muy triste", dijo Heene ante el Tribunal, donde pidió disculpas, sobre todo a los servicios públicos que trabajaron en la persecución del globo.

Richard y su esposa, Mayumi, se declararon culpables el pasado mes ante el tribunal de distrito de Fort Collins, Colorado, de haber realizado una denuncia falsa a las autoridades.

Todo comenzó el pasado 15 de octubre, cuando los servicios de emergencia recibieron una llamada de los Heene advirtiendo de que el menor de sus tres hijos, Falcon, podría estar dentro de un gigantesco globo plateado, inflado con helio y con forma de ovni que accidentalmente despegó de su patio.

La persecución fue retransmitida en directo por los medios de comunicación y mantuvo al país pendiente del pequeño durante los más de cien kilómetros que recorrió el artefacto casero por el Norte de Colorado hasta que perdió aire y cayó a tierra, sin que se encontraran rastros del niño en su interior.

Pero todo fue un ardid publicitario en el que la familia buscaba conseguir su propio programa de televisión.

El pequeño fue encontrado cinco horas después de que comenzara el incidente sano y salvo en su casa y resultó que la familia había escondido al niño en el ático de su garaje. Esa misma noche comenzaron las sospechas del montaje cuando en una entrevista el padre preguntó al niño por qué no contestó cuando lo llamaban y este replicó: "Ustedes dijeron que lo hacíamos por el show".