El tifón Lekima, que hasta el domingo había dejado 39 muertos y más de 5 millones de afectados en China, volvió a tocar tierra ayer "degradado a tormenta tropical" y provocó otros cinco muertos, por lo que el balance total hasta el momento es de "al menos 44 fallecidos, 18 desaparecidos y casi 1,1 millones de evacuados", informaron autoridades locales. "Los últimos cinco muertos se registraron en la ciudad portuaria de Qingdao, y se suman a los 39 de la provincia de Zhejiang, también en el este del país, después de la entrada del tifón en la madrugada del sábado", precisaron las autoridades.

En el condado de Yongjia, situado en esa región, las lluvias torrenciales causaron un corrimiento de tierras que bloqueó los ríos cercanos a un embalse, arrastrando a los pobladores de localidades cercanas.

Al balance se suma un fallecimiento registrado en Taiwán, donde un hombre de 64 años murió tras caer de un árbol mientras podaba como precaución. Ayer continuaban las tareas de rescate, de las que participaban más de 21.000 militares, mientras que según las autoridades los afectados eran más de seis millones y medio de personas.