La segunda semana de la 77 Vuelta a España, culminó ayer con una etapa de alta montaña

en la que el esloveno Primoz Roglic (Jumbo-Visma) le recortó otros 15 segundos al líder Remco Evenepoel (Quick Step- Alpha Vinyl), quien resistió hasta los últimos 500 metros del duro ascenso a la Sierra Nevada, y terminó cediendo tiempo, pero con una táctica de ataque, siendo quien encabezó el ascenso para así limitar al máximo el daño que podría haberle provocado un ataque de su rival directo, quien lo escolta a 1m34s.

Quien sacó más rédito, con un zarpazo dado cuando restaban cuatro kilómetros, fue el español Enric Mas (Movistar) quien arribó segundo en la etapa que ganó el neerlandés Thymen Arensman (DSM), y descontó 42 segundos a Evenepoel y 27 a Roglic, por lo que se mantiene tercero en la general, ahora a 2m01s. del malla líder.

La carrera que antes de las etapas de alta montaña estaba muy volcada a favor de Evenepoel, se mantiene abierta, cuando restan seis etapas, entre ellas tres con puertos de 1ra. categoría.

El pelotón descansará hoy en Jerez de la Frontera (Cádiz) antes de comenzar la última semana de la ronda española, que arrancará mañana con una jornada eminentemente llana de 189,4 kilómetros entre Sanlúcar de Barrameda (Cádiz) y Tomares (Sevilla), la última gran oportunidad para los velocistas.