
El ciclista irlandés Sam Bennet (Bora – hansgrohe) ganó ayer la décimo segunda etapa del Giro de Italia (Osimo – Imola, 214 kilómetros) que se resolvió en un sprint de un grupo bastante numeroso, sorprendiendo a todos y anticipando el último ataque. Simon Yates sigue siendo el líder de la carrera transalpina y el argentino Eduardo Sepúlveda, perdió otros tres puestos al arribar a más de ocho minutos.
Bajo la lluvia en el circuito de Imola y alrededores el pelotón pasó agrupado hasta la subida puntuable del día, un puerto de cuarta categoría cuya cima estaba a 7,4 km de la meta. Allí se produjo un corte que dejó "colgado" al italiano Elia Viviani que perdió rueda y no pudo recuperar.
A un kilómetro de la meta, entraron cortados el italiano Diego Ulissi, el colombiano Carlos Betancur y el esloveno Matej Mohoric obligaron a que el pelotón acelerara y se rompiera en mil pedazos.
Fueron alcanzados a 400 metros de la meta y superados por Sam Bennet y el pelotón.
Hoy se disputará la décimo tercera etapa, un parcial llano de 180 kilómetros propicio para los embaladores, entre Ferrara y Nervesa della Battaglia.
