El seleccionado brasileño concretó un debut exitoso en la Copa América, que se desarrolla en su país, con un triunfo 3-0 sobre una Venezuela que hizo lo que pudo luego del brote de coronavirus en su plantel. El defensor Marquinhos; el crack Neymar, de penal, y Gabriel Barbosa, de pecho, fueron los goleadores en el partido correspondiente al grupo B que se disputó en el estadio Mané Garrincha de Brasilia.

Brasil cumplió con la lógica. Un plantel plagado de estrellas se armó de paciencia para superar el esquema defensivo de Venezuela, por obvias razones. Un total de 11 futbolistas contrajeron covid-19 en la "Vinotinto" y restaron aún más las posibilidades de un batacazo en Brasilia.

Con paciencia y sin brillo, Brasil abrió el marcador con un tacazo de Marquiños a los 23 minutos, luego de haber perdido su equipo, antes, dos claras opciones. Venezuela no cambió el plan. La idea era evitar una goleada y dejaba un solo punta, Fernando Aristeguieta. Todo era de Brasil. Neymar anotó el segundo de penal, a los 20m. del ST y luego afirmó su rol decisivo en la victoria al generar un desborde por la banda izquierda, gambeteó a Graterol y envió el centro preciso para el ingresado "Gabigol" Barbosa. El delantero de Flamengo, de pecho, selló el 3-0 cuando el elenco "vinotinto" ya lucía desgastado por el esfuerzo.

Brasil pisó fuerte en Brasilia y reafirmó su condición de gran candidato, sin mostrar su mejor juego.

El siguiente paso de la "Verdeamarelha", defensora del título, será el jueves 17 ante Perú, mientras que Venezuela enfrentará ese mismo día a Colombia, en primer turno.

Homenaje a los héroes de la salud

El presente no daba para festejo inaugural. La Conmebol abrió formalmente la presente edición de la Copa América con un video de poco más de un minuto, ideado y producido por una empresa televisiva contratada para elaborarlo.

El trofeo que se pondrá en juego en la competencia de selecciones más antigua del mundo fue ingresado al campo de juego del estadio "Mané" Garrincha, de Brasilia por un médico y un enfermero, como homenaje a quienes combaten desde la primera línea de batalla a la pandemia que azota al mundo. Después se escucharon los himnos de Brasil (anfitrión), Colombia y la Argentina, los dos países que originalmente iban a albergar el torneo. Y después, sí, el puntapié inicial del partido.