En esta oportunidad parece que va en serio. Los dirigentes de Independiente están buscando un manager. El año pasado mantuvieron reuniones con Diego Forlán, Nicolás Frutos y Daniel Montenegro. Lo cierto es que nunca hubo decisión política para incorporar a alguien en esa función.

Pablo Moyano, vice del club y mano derecha de su padre y presidente Hugo, siempre se mostró reticente y bajó el tema de la discusión.

Pero el mal rendimiento del equipo parece haber llevado a cambiar de opinión a quienes conducen los destinos de la institución. En la tarde de ayer, Hugo Moyano se juntó con un histórico del club y que lo dirigió como Jorge Burruchaga para indagarlo acerca de su proyecto.

Y para la semana que viene está previsto un cónclave con Pablo Guiñazú, campeón con el Rojo bajo el mandato del Tolo Gallego y quien desde su retiro viene dando charlas de liderazgo.

Fue Lucas Pusineri quien sugirió que contraten a un manager.

El técnico se lo dijo al secretario general, Héctor Maldonado en una charla que mantuvieron a principio de semana luego del golpazo que resultó la caída ante Huracán.

Independiente cerrará su torneo mañana recibiendo a Central Córdoba de Santiago del Estero y luego disputará la Copa de la Superliga.

Pusineri confía en la promesa hecha por parte de los directivos para traerle refuerzos de jerarquía tras haber sufrido la salida de varios nombres importantes.


Mete mano

Pusineri tiene pensando darle la chance mañana a varios juveniles de Independiente, dejando de lado a players más experimentados y de pobre rendimiento. "Tengo el 70% del equipo confirmado. Voy a poner varios pibes, pero estoy muy lejos de pasar la escoba", sostuvo el DT.