Sepp Kuss se convirtió anteayer en el quinto ciclista en la historia de este deporte en terminar entre los primeros 15 clasificados en las tres grandes Vueltas disputadas en la misma temporada. El primero en lograrlo fue el francés Raphael Geminiani, en 1955. Dos años después, ’57, lo consiguió el italiano Gastone Nencini. Debieron pasar 34 años para que el español Ricardo Chozas lo consiguiera en 1991. Otro español fue el penúltimo, Alejandro Valverde, en 2016. Y ahora el estadounidense del Jumbo Visma, que fue el gregario más importante para que el esloveno Primoz Roglic ganará el Giro de Italia, y repitió su silenciosa tarea aportando su granito de arena para que el danés Jonas Vingegaard consiguiera su segundo Tour de Francia consecutivo.

Ahora bien, la victoria del corredor norteamericano despertó una de las más grandes polémicas del deporte del pedal en los últimos tiempos. Entronizado como líder de la Vuelta de España en la novena etapa, sufrió el ataque de sus dos compañeros de equipo en la subida al mítico L’Anglirú. Hecho que generó opinión contraria contra su equipo, y fundamentalmente contra Vingegaard y Roglic. Circunstancia que llevó a quienes dirigen a la formación neerlandesa a decidir que se respetara su condición de líder hasta la bajada de bandera en la Plaza de Las Cibeles.

Inédito, fue el logro de los hombres del Jumbo, quienes ganaron las tres grandes en la misma temporada.

Curiosamente, en la etapa que fue "colgado" por sus compañeros de equipo, Kuss recibió la ayuda de quien era uno de sus rivales directos, y víctima del poderío de la escuadra de los Países Bajos. El español, de origen vasco, Mikel Landa lo pegó a su rueda y logró minimizar los daños, permitiendo que mantuviera su malla roja de líder por 8 segundos con respecto al doble ganador del Tour.

La victoria del ciclista nacido hace 29 años en Colorado le permitió al Jumbo Visma ser el primer equipo en ganar el tríptico de grandes en un mismo año. La victoria en España cerró un año en el que se festejó en Italia (Roglic) y en Francia (Vingegaard).

Reunir a sus dos ases en una misma prueba ha generado una ruptura, producto de los celos de cada uno, que llevan a pensar que uno de los dos sobra. Y, como Roglic tiene aún expectativas de ganar el Tour de Francia, ha dado instrucciones a su representante para que le busque una nueva escuadra que pueda llevarlo a la "ronda gala" como jefe de filas. Y, según los medios europeos, los dos que podrían recibir en su seno al esloveno son el Lid-Trek y el INEOS Grenadiers.

O sea que el momento de mayor esplendor del equipo puede ser el inició de la caída del imperio. La batalla civil que se desató en España, abrió una grieta entre sus dos principales figuras.

 

Los primeros

El Jumbo-Visma logró en 2023 algo que ninguna escuadra había podido conseguir: poner un hombre en el escalón más alto del podio de las tres grandes pruebas del calendario. El esloveno Primoz Roglic ganó su primer Giro de Italia. El danés Jonas Vingegaard se impuso en su segundo Tour de Francia de manera consecutiva. En ambos casos, el estadounidense Sepp Kuss fue clave con su trabajo de principal gregario. Y, quiso el destino y la carrera, que el gusano se convirtiera en mariposa, y de peón pasara a ser rey en la Vuelta a España.