Desamparados, que la semana pasada había tomado algo de oxígeno, parece hundirse. El Puyutano tenía todo a favor: en su casa, ante su gente, arrancó ganando con un gol de Londero. Sin embargo, por falta de eficacia en el arco rival y por errores en el fondo, volvió a entregar un partido. Y puede costarle caro.

En el comienzo de la segunda y última ronda de la Reválida, el conjunto Víbora recibió a Juventud Unida de San Luis. En el primer tiempo fue más que su rival e incluso después del 1-0 tuvo chances claras para aumentar el marcador, pero no lo hizo y lo pagó carísimo. 

A los 24 minutos del segundo tiempo, un cabezazo de Facundo Sosa puso las cosas iguales en el tanteador. Y a los 48, cuando el partido se moría, los puntanos, otra vez de la mano de Sosa, llegaron a una victoria impensada. Fue un balde de agua helada para los hinchas que se dividieron entre el aliento y los insultos.

De esta manera, Sportivo Desamparados sigue muy complicado con el descenso. La próxima fecha deberá visitar a un rival directo en la lucha: Concepción, en Tucumán.