APRETADO. Juan Castro intenta controlar la pelota ante la doble marca de Vitale y Navarro. Peñarol no pudo con Camioneros en la ida y la definición del ascenso pasó para el miércoles en Buenos Aires.

En un partido de 180 minutos, todo vale, todo suma. Todo tiene su trascendencia y para Sportivo Peñarol, el primer paso la serie final por el Ascenso 2 del Federal B terminó con el amargo sabor de no haber podido hacer su diferencia. Logró mantener el cero en su arco pero se quedó con la impotencia de no haber convertido, sabiendo que un gol puede ser la pequeña gran diferencia. El sólido esquema de Camioneros, las condiciones del clima y la escasez de argumentos en el equipo sanjuanino terminaron haciendo que en los primeros 90", Peñarol se quedara con la cara larga.

Camioneros se paró bien de entrada y lo maniató al Bohemio. Aislado Salinas como generador de juego, los embates de Peñarol terminaron siendo pelotazos frontales, intrascendentes, que únicamente minaron las piernas de Figueroa y de Jorquera. Tan poco juego ofensivo tuvo el Bohemio que en la primera parte nunca inquietó a Evangelisti. La más clara de la primera fracción fue de Camioneros y la resolvió Biasotti poniéndole el pecho a un remate de Vitale.

En el complemento, Peñarol cambió más juego por actitud y casui arranca en ventaja cuando Facundo González remató cruzado abajo al primer palo de Evangelisti. Camioneros se fue acomodando y a los 42" pudo haber liquidado la serie cuando Vico no pudo con el enorme Biasotti en el único mano a mano de todo el partido. No se pudieron sacar ventajas, pero la obligación era de Peñarol. Ahora, de visitante, el peso será de Camioneros como local con todo lo que eso implica en una definición tan cerrada.

CLAVES

 

Intenciones

Peñarol apostó a ser ofensivo con dos delanteros centrales, enganche y tres volantes pero esa propuesta se fue quedando sin ideas cuando Salinas -su enlace- quedó sin contacto con los dos puntas: Jorquera y Figueroa. Eso fue determinante.

Solidez

Camioneros trabajó el partido de atrás para adelante, con una línea de cuatro que no se desarmó jamas y el trabajo criterioso de sus dos volantes centrales y de los dos volantes externos que se ocuparon de achicar todos los espacios.

Incierto

En los papeles, el empate de esta ida es negocio en Camioneros pero ahora su obligación será otra porque tendrá que arriesgar más y ahí es donde aparecen las chances de Peñarol para la revancha del miércoles en Buenos Aires.