En amagues. Mauro Icardi no pudo cristalizar las escasas opciones que tuvo al acercarse al arco. La falta de gol y carácter le pasó factura a la selección que no superó el 1-1 ante el último de las Eliminatorias.

Tal como se preveía de ambos lados, Argentina tuvo tal apuro que pretendió hacer antes el segundo que el primer gol. Esa ambición desmedida lo llevó a cometer errores en la definición y apenas empató 1 a 1 ante Venezuela en el cierre de una nueva jornada de las Eliminatorias Sudamericanas camino a Rusia 2018. 


A diferencia de los últimos partidos se generaron opciones: cuatro claras en el primer cuarto de hora y cero goles. 
En tres de ellas el protagonista fue Mauro Icardi, quien en un par no acertó y en la restante le ahogó el grito el gran arquero Fariñez. 


La circulación del balón fue más veloz que ante Uruguay, aunque nuevamente Lionel Messi estuvo muy solo en la generación. 


Ever Banega lo intentó, aunque nunca se llegó a complementar del todo con su comprovinciano. 


El paso de los minutos y el cero a favor de Argentina hicieron aparecer los nervios. También tomaron protagonismo las imprecisiones y pese a ese contexto Argentina generó más opciones. 


Otra vez Icardi marró su remate ante el arco venezolano ya a los 22’; Dybala metió un zurdazo demasiado cruzado a los 32’ y en el epílogo Messi hizo lucir, otra vez, a la figura de la etapa: Wuilker Fariñez.

LOS GOLES


Las emociones llegaron rápido en el complemento. Al intenso frío en la noche de Núñez se le sumó el gol venezolano a los 5’: una contra letal de la visita derivó en la gran definición de Jhon Murillo para el 1-0. 
El silencio se podía oír por ese entonces en el Monumental. Y ante tanta impericia para definir el gol debió llegar por un remate contra su propio arco del volante Rolf Feltscher. 


Era volver a empezar, pero con poco más de media hora por delante. 


Sin embargo, Argentina ahí demostró que esta situación le pesa. Que es un grupo al que el temor de no ir al Mundial lo tiene bloqueado. 


Es que salvo Messi y el entusiasmo de Acuña (gran ingreso del ex Racing jugando en su posición natural), Argentina se quedó en la apatía. 


No hubo ingreso de Darío Benedetto que cambiara la historia. Ni dibujo táctico de Sampaoli y su laboratorio que pudiera torcer el rumbo. El equipo dejó muy poco y una preocupante falta de gol.


La albiceleste se zambulló en esa impotencia de querer y no poder, sabiendo que ‘Rusia 2018’ es una incógnita. 

Preocupante

Desdibujado

La selección argentina fue una tromba en el comienzo del partido, en el que generó cierta ilusión. Buscó abrir rápido el marcador, pero nuevamente la falta de puntería le jugó en contra. En esa parte tuvo seis chances claras en esos 45’.
 

Impotente

Al gol de Venezuela al inicio del complemento, Argentina pudo neutralizarlo con el rápido empate. Pero desde ese momento, sin aprovechar el envión, no supo cómo abrir un fondo visitante que se cerró muy bien y tuvo un planteo seguido a la perfección.
 

Lo que viene

™Sin margen para el error, en los dos últimos partidos el de la selección dirigida por Jorge Sampaoli será más un tema mental y de carácter que de nivel futbolístico. En esa realidad transita esta Argentina que está carente de líderes.