River Plate y Boca Juniors protagonizarán hoy en el estadio Monumental una nueva edición del partido más relevante del fútbol argentino, el superclásico, cuya previa permite presentarlo como un duelo de equipos de realidades dispares y objetivos, al menos por el momento, diferentes.

Es que los dirigidos por Alfio Basile llegan con tres victorias en forma consecutiva y el ánimo claramente en alza, mientras que los de Núñez transitan con cierta pena un torneo Apertura en el cual sólo consiguieron un triunfo que se remonta a una ya remota tarde de fines de agosto, es decir, hace un mes y medio y siete partidos.

Un imponente operativo policial que afectará a 1.200 efectivos controlará las inmediaciones y el interior de un estadio Monumental que lucirá repleto a las 16.15, cuando Saúl Laverni, en su debut oficial en un superclásico, marque el comienzo del partido.

El técnico de River, Leonardo Astrada, se habría inclinado por mantenerles la titularidad a Nicolás Domingo, Matías Abelairas y Diego Buonanotte, por lo que Diego Barrado y Cristian Fabbiani irían al banco de suplentes. Al menos, eso es lo que ensayó en el entrenamiento realizado ayer.

Además, es casi un hecho que volverá Gustavo Cabral tras cumplir las dos fechas de suspensión y que Paulo Ferrari, Nicolás Sánchez y Cristian Villagra completarán la última línea.

Así, el "Jefe" apostará en la ofensiva a los pies sensibles de los más pequeños en estatura, Ortega-Gallardo-Buonanotte, resignando presencia ofensiva y estatura con la ausencia de Fabbiani pero, en teoría, ganando en fluidez y velocidad final en los metros decisivos.

En la vereda de enfrente, se supo que Sebastián Battaglia jugará pese a la sinovitis en su rodilla derecha, nuevamente como volante por la banda, ya que Ariel Rosada será el mediocampista central.

A su vez, Martín Palermo estará en la delantera con una máscara para proteger la lesión en la nariz sufrida en el partido de Argentina frente a Perú por las Eliminatorias, junto con el autor de los dos goles en el 2-1 ante Tigre, Nicolás Gaitán.

Son catorce los puntos que acumula Boca contra sólo seis de River, aunque el punto donde ambos convergen es en la deuda que aún mantienen con la regularidad y el buen fútbol.

El superclásico de hoy será una buena oportunidad para River de revertir un presente sombrío, que obligó a la salida de un entrenador (Néstor Gorosito) y a la llegada de otro que aún no pudo obtener un triunfo desde su debut hace dos fechas, mientras que para Boca representa la chance de conseguir un envión importante para sostener su esperanza de ganar el título o, al menos, de clasificarse para la Copa Libertadores.