A mejorar. El Verdinegro tuvo una pálida actuación en la Copa Argentina y hoy buscará modificar esa imagen.

En el fútbol, el juego da identidad y en esa búsqueda San Martín -versión 2018- hoy jugará el primer amistoso en San Juan dentro de la pretemporada para la Superliga de AFA, enfrentando desde las 10 en Concepción a Independiente Rivadavia de Mendoza que milita en la Primera B Nacional. Será solo para la prensa sin presencia de público.

En este camino de reformación del plantel que Walter Coyette tomó en los tramos finales de la temporada pasada, el recambio ha sido más que considerable y después del arribo de una docena de refuerzos, con partidos se irá forjando la nueva identidad de este San Martín. Pasó ya el frustrado paso de la Copa Argentina y atrás quedaron también los ensayos en Buenos Aires. Ahora, en suelo sanjuanino Coyette empezará a darle minutos a su nuevo esquema.

Por lo pronto y a la luz de lo que se vio en las dos prácticas de fútbol de esta semana que fue más que intensa, San Martín mostrará dos cambios respecto de la alineación que perdió contra Brown de Adrogue. Así, Diego Cardozo y Martín Bravo tendrán juego desde el inicio dejando como opciones ahora a Pablo Brandán y a Nazareno Solis, respectivamente. El resto, asoma igual al menos en el inicio con cosas buenas para repasar y otras para mejorar. En el arco, la presencia de Luis Ardente no admite reparo alguno porque es símbolo, capitán y referente.

En la defensa, pese a la caída por penales en Copa Argentina, tal vez se vio lo más prometedor porque la línea de cuatro que tiene a Gonzalo Prósperi y a Gianni Rodríguez por los laterales mas la dupla central de Juan Rodríguez y Arian Pucheta no pasó sobresaltos y ofreció algunas aristas más que interesantes. Del medio para arriba tal vez estén las grandes preguntas porque no hubo profundidad, no generó peligro pese a que siempre intentó respetar el trato por la pelota. Coyette decidió darle titularidad a Diego Cardozo por encima del trajinar de Brandán y corrió al mediocentro a Claudio Mosca como gran retoque táctico. Manteniendo si a Franco Cristaldo y a Marcos Gelabert, que es otro de los que marca en paso en esta nueva versión del Verdinegro. Para atacar, la elección fue Martín Bravo por Solís para asociarlo con Castillejos, apostando al desequilibrio de Bravo.