Definitivamente este Dakar 2011 no es para Marcos Patronelli, el imaginado por él hace más de dos meses. Es que un accidente en un entrenamiento le valió la fractura del peroné y la clavícula, que lo tuvo con la incertidumbre de largar hasta hace cuatro días. Ayer, cuando se lanzó la prueba, el campeón del Dakar el año pasado se demoró en su salida una hora debido a un problema en el alternador y terminó siendo penalizado con seis horas de retraso. Este duro castigo se dio por parte de la organización, una vez que los otros pilotos pedían la exclusión del argentino teniendo en cuenta que el reglamento marca que si se demora media hora en partir debe ser sacado del resto de la carrera. El año pasado se dio otra gran controversia, cuando no lo excluyeron por una infracción.

-¿Qué se te cruzó por la cabeza cuando estabas demorado en la salida?

-Cuando ví que el cuatri fallaba y no encontraba el problema pensé "chau" me voy, no corro nada. Pero una vez que lo solucionamos, me puse las pilas y le di con toda la fuerza.

-¿Te golpea aún más en lo anímico el hecho del retraso?

-Es bueno estar participando y más en las condiciones que lo hago esta vez. Pero, es sentirte afuera del Dakar. No quiero hacer un pronóstico de lo que vendrá porque cuando digo que voy a cuidar el cuatri me rompo yo y cuando digo que me voy a cuidar yo, rompo el cuatri.

-Otra vez tuvieron problemas con tu hermano (Alejandro) para cargar combustible en una estación de servicio por el asedio de la gente, ¿cómo manejás ese tema?

-Estuvimos con Alejandro 50 minutos, había una cantidad de gente impresionante pero eso juega contra los pilotos que tenemos que largar. Ya una vez le planteé el tema a Etienne (Lavigne, director del Dakar) para ver si eso se puede controlar.

-Con este nuevo panorama, ¿qué expectativas tenés para lo que resta de la carrera?

-Lo vuelvo a repetir, esta vez no vine a ganar, vine a terminar.