Trescientos cuarenta y dos días parecen mucho pero en realidad no lo son. No pasó ni siquiera un año de aquella tarde gloriosa en la cancha de Belgrano en Córdoba aquel 8 de diciembre cuando San Martín tocaba el cielo con las manos, a este 15 de noviembre gris en Mar del Plata donde el Verdinegro se despidió de la máxima categoría del fútbol argentino. Fueron 342 días de una aventura por la Primera División donde el Verdinegro volvió a padecer el karma de siempre, no poder mantenerse en la máxima categoría.

El de este sábado ante Aldosivi significó el cuarto descenso para San Martín: la caída en La Feliz se suma a los descensos del 2008, 2013 y 2019. Hoy estuvo a solo 20 y pico minutos de quedarse en la categoría cuando un pibe de la casa como Santiago Barrera entraba desde el banco, se vestía de héroe y hacía ilusionar a toda una provincia con la permanencia. Pero no, hubo errores como pasó durante todo el campeonato y Aldosivi lo dio vuelta. Faltó muy poco para lograr la permanencia, solo un par de goles. Pero también faltó muy poco en esa temporada hace seis años, donde el Verdinegro estuvo a tres puntos de la salvación.

Esta vez hubo derrota y descenso, de esos que duelen aunque era de esperarse por la pésima campaña de la primera parte del campeonato. “Hay que hacer autocrítica, hicimos las cosas mal”, dijo Miadosqui. Y sí, a la hora de buscar responsables habrá que analizar qué factores influyeron para llevar de a poquito a San Martín al descenso. Si el armado del plantel, si la escasez de refuerzos de renombre o si también influyó no poder retener la base de ese ascenso en Córdoba. Que la salida de Raúl Antuña era antes o que si la llegada de Leandro Romagnoli fue tarde. Todo, todo entrará en un análisis que deberán resolver los “popes” para llegar a una conclusión en ese balance que cerrará el paso de San Martín en la Primera División.

“Debería dar un paso al costado”, dijo Miadosqui en Mar del Plata al puñado de periodistas presentes en La Feliz post-descenso. El mandamás verdinegro que desde que asumió hace 20 años por primera vez lo hace conoce a la perfección cada pasillo y rincón del club de Concepción puso en duda su continuidad y con eso, abre una incógnita enorme en el mundillo verdinegro.

San Martín perdió la plaza en Primera División y con el descenso no solo perdió San Martín, perdió San Juan. La provincia sigue estando a años luz de diferencias de provincias vecinas como Mendoza, por ejemplo, que si bien perdió una plaza en Primera con el descenso del Tomba, asegura dos en la máxima categoría con Independiente Rivadavia y Gimnasia y otras tantas en las categorías inferiores. San Martín terminó una aventura que duró 342 días, que reavivó el karma de los pasos fugaces por Primera pero deberá sacudirse rápido y pensar en armarse bien para soñar porqué no, en volver lo antes posible.