Faltaban minutos para la 1 de ayer cuando el oficial Gabriel Zárate y su acompañante en el móvil de "Protección Ciudadana" en Buenos Aires, el sanjuanino Jesús Porres (36) fueron interceptados por una mujer que los puso en alerta: les dijo que acababa de ver a tres hombres y una mujer, y que entre ellos iba el sujeto que había matado a su hijo el pasado 14 de enero. Zárate ordenó acelerar y en instantes localizaron al grupo. Se les atravesaron en el camino con una frenada brusca y fue lo último que hicieron: la respuesta fueron siete balazos y un escape a toda carrera. Atrás quedaron el oficial con un tiro en un hombro y otros más en su chaleco antibalas. Porres no tuvo esa suerte: uno de los tiros se le coló por debajo del ojo derecho y le atravesó el cráneo. Murió prácticamente en el acto.

Todo pasó a las 0,48 de ayer en el cruce de Calle 8 y Cuba, en la localidad de Billinghurst, partido de San Martín, en el conurbano bonaerense. Allí quedaron 7 vainas servidas 11.25 y una pistola 9 mm con la numeración limada que fue descartada por los delincuentes.

Porres era padre de cuatro chicos, había sido militar y tenía una vida ligada a las fuerzas de seguridad: su padre fue gendarme y tres de sus hermanos son policías, uno en Buenos Aires y otros dos en San Juan.

Por el crimen del joven sanjuanino y el intento de asesinato del oficial Zárate ayer había dos detenidos, ambos parientes de Miguel Ángel "Mameluco" Villalba, un narco que cumple una condena de 23 años. Los sospechosos capturados en la Villa 18, cercana al lugar del crimen, son un hijo de este sujeto, Iván Villalba (26) y un sobrino del traficante, Víctor Manuel Sánchez (37).

Iván Villalba llevaba 4 años y 8 meses cumplidos de una pena unificada de dos causas por drogas y lesiones, que le quedó en 8 años y 6 meses. Desde hace un año tenía salidas transitorias y últimamente se le permitía salir los sábados a la mañana y volver a la cárcel de Ezeiza los domingos a la noche. Pero la última vez no volvió.

El crimen del sanjuanino provocó numerosas muestras de dolor en las redes sociales": "Jesús hermano querido, loquito lindo, cómo te voy a extrañar, te fuiste como un Héroe. Q.E.P.D.", escribió su hermana Melina Porres.

Faltaban dos semanas para que Jesús Porres cumpliera 7 años como empleado en el municipio de San Martín, donde no cumplía tareas de seguridad.