• YAMILA PÉREZ

Madre de 4 chicos y 25 años de edad fue encontrada muerta el 17 de junio de 2018 con 8 puñaladas, sus brazos cortados y su rostro sin piel, todo hecho con un cuchillo en un descampado del callejón Muñoz y Luna en El Mogote, Chimbas. Evaristo Molina (69) confesó después haberla asesinado para evitar un chantaje. Yamila ejercía la prostitución.

  • LEILA RODRÍGUEZ

Fue hallada sin vida esta mujer de 24 años el 27 de junio de 2018 en un descampado, cubierta de hojas y una frazada cerca de su casa en el Lote Hogar 55, Ullum. Madre de una nena de 3 años, murió a causa de 4 puntazos en su espalda y pecho. Una prueba de ADN comprobó que su asesino fue Esteban "Wilo" Pacheco (24), expareja y padre de su hija.

  • ZOE ABALLAY

Con apenas 4 años, murió el 19 de noviembre de 2016 luego de ser violada y asfixiada por su tío, Sergio Mereles (26), en su casa del Lote Hogar 59 en Chimbas. El asesino, condenado a perpetua, en principio dijo que la niña se había ahogado con vómito.

  • YUTIEL CASTRO

Tenía 1 año y 7 meses cuando quedó al cuidado de Jhonatan Alberto (28) y Angel Nahuel Flores (19), quienes provocaron su muerte a golpes tras destrozarle el hígado y provocarle una hemorragia porque no paraba de llorar, el 8 de mayo de 2014 en un lugar que usurpaban en Capital. Su madre, Joana Castro (22 años y fallecida 6 meses después) había salido a prostituirse.

  • ESTELA BUSTOS

Embarazada de 6 meses, el 25 de mayo de 2013 sufrió los celos de su marido, Cristian Fretes (35) quien la asesinó a golpes y cuchillazos, en su casa del barrio Las Alondras, Chimbas. Todo esto frente a sus 4 hijos, obligando a uno de ellos, de 11 años, a limpiar la sangre tras la masacre y mentir frente a la Policía.

  • CRISTINA OLIVARES

Fue hallada atada de manos y con 160 puñaladas en su rostro, cuello, espalda y pecho, cerca de una finca en Pocito el 7 de julio de 2012. Las autoras del crimen de la madre de 2 hijos de 26 años fueron Rosa Videla (28) y Noelia Corvalan, su cuñada. Videla era amante del esposo de Olivares, Miguel Palma.

  • ALEJANDRA BOLAÑOS

Con un golpe en la cabeza y a 50 centímetros bajo tierra fue hallada el 16 de agosto de 2011 la mujer de 42 años, desaparecida desde el 29 de julio. Mariela Gutiérrez (21) indicó donde había enterrado el cuerpo. Ambas vivían en La Puntilla, Caucete, y una vieja disputa motivó el crimen. Gutiérrez confesaría haberla matado junto a su pareja, Antonio Angulo (51).

  • ALBA RUTH PIZARRO

Asesinada a golpes con una piedra por su esposo, el entonces expresidiario Carlos Limolle (37). El 28 de octubre de 2011 le hizo reproches por celos y asesinó a la madre de 6 chicos, de 33 años de edad, en calle América al sur de calle 18 en Rawson.

  • MARISA VIDELA

Marisa Videla (38) fue víctima de los celos y la persecución de su expareja, el ex cabo de la Policía de San Juan Aldo Castro. Tras una relación y separación cargada de violencia, Castro empezó a hostigar y amenazar a Videla, madre de dos hijos, para que volvieran. Ante la negativa de la mujer, finalmente, el 28 de junio de 2007 la asesinó de 21 puñaladas en la esquina de su casa en la Villa Muñoz en Santa Lucía.

  • MYRIAM GONZÁLEZ

Myriam González (47) le tocó sufrir los celos y el rechazo de separación de su pareja, Ernesto Jaime (49) que ante la negativa de la mujer de volver con él, le clavó 7 cuchillazos en la zona del rostro, donde el hombre dejó clavado el cuchillo y lo encontraron los pesquisas, el 17 de julio de 2008 en el barrio Los Olivos en Caucete. Jaime nunca admitió el crimen. González era madre de un niño.

  • MARÍA JUANA PÁEZ

Enfermera de 55 años, la sanjuanina vivía en el barrio Infanta, en Mendoza. El 3 de noviembre de 1998 desapareció, y la pareja de su amiga Gladis Puebla, José Valenzuela, confesó que esta última la había matado a golpes y estrangulado, para luego quemar su cuerpo por más de 4 horas hasta hacerlo cenizas. Nunca se esclareció el móvil (creen celos por José) y sus restos nunca se encontraron.

  • JOSÉ ANTONIO FERNÁNDEZ

Encontraron su cuerpo en un canal de Rawson en avanzado estado de descomposición, el 28 de noviembre de 1998. Hacía dos días que el mecánico de 29 años había desaparecido de su casa en el barrio Manantial en Capital, donde vivía con su pareja y tres hijos. José fue degollado.