Un caso más de convivencia entre un joven obrero de 31 años con la madre de sus dos hijos y la hija adolescente de la mujer terminó en un gran problema cuando la chica (tenía 17 años) quedó embarazada y lo atribuyó a las 'violaciones' que había sufrido a manos de la pareja de su mamá. En septiembre de 2020 ese joven terminó preso y así llegará este viernes al juicio que lo tendrá como sospechoso de un delito muy grave: abuso sexual con acceso carnal agravado por ser encargado de la guarda y por la situación de convivencia con la presunta víctima.

Durante la investigación, ese sujeto, Lucas Olguin, admitió que mantuvo sexo consentido con la chica. Su relato fue mantenido por sus parientes y en un tramo del proceso hasta por la madre de la jovencita, porque supuestamente admitió que las relaciones sexuales no fueron violentas. Esa versión será el eje defensivo del abogado Hugo Uzair, quien negaría también la paternidad que se le atribuye a su cliente, dijeron fuentes judiciales.

El abogado Hugo Uzair intentará demostrar que no hubo violación.

Con ese escenario en puerta, lo más probable es que la fiscal del caso, Marcela Torres, le pida al juez Martín Heredia Zaldo (Sala I, Cámara Penal) que ordene un cotejo de ADN entre la criatura en cuestión y el sospechoso, indicaron.

La fiscal Marcela Torres pediría un cotejo de ADN para despejar dudas.

El caso fue denunciado el 25 de septiembre de 2020 en la Comisaría de la Mujer. Cuando la chica fue entrevistada por psicólogos, precisó que había sido abusada el 12 de agosto de ese año, un día que ella veía televisión sola en una habitación y el acusado llegó de trabajar. También dijo que la había sometido en otra ocasión, una vez que la llevó engañada en micro hasta un lugar donde supuestamente le había conseguido trabajo y terminó violándola en la zona de la Quebrada de Zonda.

En ambos caso la menor dijo que accedió por miedo a terminar golpeada por el sospechoso y también porque temía que su madre no le creyera. Aseguró además que decidió decírselo a su mamá cuando supo que estaba embarazada. Los psicólogos que la entrevistaron calificaron de 'verosímil' su relato y consideraron que la jovencita es una persona vulnerable, que se sintió impotente y en un estado de indefensión absoluta frente al estrés de las situaciones que atravesó.