Los jueces Miguel Dávila Safe, Juan Carlos Caballero Vidal y Martín Heredia Zaldo (Sala I, Cámara Penal) condenaron ayer a 18 años de cárcel a un exboxeador amateur de peso welter sanjuanino, hoy de 66 años, por el delito de abuso sexual con acceso carnal agravado por la convivencia preexistente, continuado, en perjuicio de una nena de 10 años que conocía, pues es la nieta de su ahora expareja y madre de su hijo. El fallo se ajustó en gran medida a lo que habían solicitado la fiscal Marcela Torres (18 años) y Carlos Reiloba, el defensor oficial que actuó en representación de la familia de la nena. El defensor del imputado, Horacio Merino, había pedido la absolución y ahora podrá reclamar la revisión del fallo ante la Corte de Justicia.

Los abusos que sufrió la niña ocurrieron entre los 9 y los 11 años. Comenzaron en 2014, con al menos cinco hechos de manoseos mientras el acusado vivió un mes en la casa de la víctima. Al año siguiente y, ya cuando alquilaba un departamento cercano a la casa de los padres de la nena, la hizo pasar a su casa cuando veía un video porno y la violó. Luego, la niña reveló que la sorprendió sola en su casa y la besó y manoseó metiéndole sus dedos en sus partes íntimas. Ayer, el acusado negó cometer delito alguno y cargó contra su familia. Dijo que su padre los dejó por otra mujer, y que en la casa de la niña se armaban juntaderas con alcohol y mujeres de la calle y que vendían drogas.