Abusador confeso. El sujeto de 43 años confesó su autoría en un juicio abreviado y ayer lo condenaron a 14 años y 6 meses de cárcel.

Un sujeto de 43 años fue condenado ayer a 14 años y 6 meses de cárcel por el juez de la Sala I de la Cámara Penal, Juan Carlos Caballero Vidal (h) quien consideró acreditado que durante 3 años violó a su hijastra: desde que tuvo 15 años y hasta que tuvo 18, cuando incluso tenía novio. La chica había denunciado que los manoseos y otros abusos habían comenzado cuando tenía 7 años, dijeron fuentes judiciales.

Un par de años atrás, cuando la propia víctima denunció el caso, el acusado intentó desligarse al asegurar que la víctima le contó que había debutado sexualmente antes de cumplir 15 años en La Rioja, donde vivían porque él trabajaba allí. Y que lo denunció luego de que él la reprendiera, ya con poco más de 17 años, por sorprenderla manoseándose con su actual novio.

Sin embargo al llegar a debate en la Sala I de la Cámara Penal, admitió su autoría y a través de su defensa acordó recibir 15 años y 6 meses de cárcel en un juicio abreviado con la fiscal Marcela Torres.

Tan dañinos resultaron los ultrajes sexuales para la jovencita, que cuando comenzó a consultar a una psicóloga concluyó que su mamá siempre estuvo al tanto y optó por apoyar a su pareja, pues la mujer llegó a decirle que ella lo provocaba. Por eso -declaró- no puede ni verla.

Su abuela materna, una amiga de su madre y sobre todo quien fuera su compañero de escuela y luego su novio, fueron los pilares fundamentales para esa niña que adquirió un notable sobrepeso a causa de los traumáticos abusos, hasta que se hizo fuerte y llegó a bajar 25 kg.

Los detalles y el modo en el que relató su terrible experiencia ante los psicólogos resultaron muy creíbles para esos profesionales y también para el juez y el fiscal que investigaron el caso. Así supieron que a los 7 años recibía besos en la boca de su padrastro (le decía "papá") quien le decía además que estaba enamorado de ella. A los 10 comenzó a mostrarle sus genitales. A los 11 le introdujo los dedos. Y a los 15 comenzó a violarla por todas las vías conocidas.

"Me encerró y me quería manosear"

Una joven de 21 años denunció que un enfermero del Hospital José Giordano, de Albardón, quiso abusar de ella cuando fue a colocarse una inyección, en la mañana del pasado viernes. "Me hizo pasar, cerró la puerta con llave y se me vino encima para manosearme. Me quería bajar todo el pantalón y subirme la remera, y me acariciaba las manos", aseguró la denunciante. Según su relato, el calvario duró aproximadamente media hora, hasta que el enfermero la dejó ir. De inmediato dio aviso a las autoridades del hospital y además radicó la denuncia en la Policía. El caso quedó en manos de la Comisaría para la Mujer, desde donde detuvieron al acusado, identificado como Anselmo González (45).

Además, desde el Ministerio de Salud lo sumariaron y lo separaron del cargo hasta que la Justicia decida si cometió o no algún delito.