Gastón Picasso (46 años, camillero) negó otra vez ayer ante el juez Juan Carlos Peluc Noguera (Sala II, Cámara Penal) y la fiscal Marcela Torres, haber empuñado un arma de fuego contra una jovencita vecina suya que sufre un retraso mental, para poder violarla en su casa de Rivadavia. Y reiteró que la grave acusación en su contra es una venganza del padre de la chica. ¿Por qué? Según Picasso, en una ocasión que uno de sus hijos cumplía años, los hijos del hombre fueron al festejo, le sustrajeron algunos regalos al cumpleañero y él fue a reclamarle la devolución de esos objetos, dijeron fuentes judiciales.

Además, en la primera audiencia del juicio hubo un careo con el padre de la chica. Y la fiscal solicitó el testimonio de otras cuatro personas, petición que fue compartida por el defensor de Picasso, Franco Montes.

El caso fue denunciado el 17 de mayo de 2018, cuando la menor (tenía 16 años) le contó a una de sus hermanas que andaba triste y angustiada por lo que le había hecho Picasso, una vez (en noviembre de 2017) que fue con su hermano a pedirle ropa, pues el hombre acostumbraba a ayudar a sus vecinos más humildes.

Ese mismo día su papá fue a increpar al camillero del hospital Marcial Quiroga y puso la denuncia para exigir Justicia. En los informes psicológicos sobre entrevistas a la menor, se asegura que no miente.