El tribunal de apelaciones en lo penal durante la cuarentena, rechazó un pedido para excarcelar a un albañil de 34 años, que está detenido desde el 12 de octubre de 2019 sospechado de cometer aberrantes delitos sexuales contra una pequeña vecina de 11 años. Según reveló la investigación, el sujeto le exhibía sus genitales, la obligaba a ver videos pornográficos, la violó. Y cometió tantas veces estas maniobras que al final corrompió el sano sentido del sexo en la menor, dijeron fuentes judiciales. Tan grave fue el daño en la salud mental que le provocaron esos ultrajes, que un día la nena intentó matarse consumiendo pastillas, indicaron. El hecho había sido denunciado por la madre de la menor en el ANIVI el 11 de octubre de 2019, luego de que le avisaran las docentes de la escuela a la que concurría su hija y luego de algo más terrible, pues un día la encontró en su habitación bajo los efectos de unas pastillas que había consumido con la intención de quitarse la vida.

Al sospechoso no se lo menciona para preservar a la niña. Ambos viven en Pocito y fue el defensor del imputado, Washington Rodríguez, quien pedía su liberación invocando normas constitucionales y tratados internacionales para sostener que no había razones jurídicas válidas para la prisión preventiva de su cliente, pues en todo momento se había mostrado colaborador con la Justicia y, por lo tanto, a su entender no existían motivos para creer que iba a fugarse o a entorpecer la investigación.

Al analizar el planteo, la Cámara de Apelaciones de Única Instancia en la extraordinaria feria judicial integrada por el camarista penal Maximiliano Blejman y sus pares en lo civil, Juan Carlos Pérez, y en lo laboral, Lucía Daroni de Pontoriero, desestimaron el planteo por varias razones.

Entre los motivos considerados por los jueces estuvo la escala penal de los delitos que, a priori, se estima con un mínimo de 8 años de cárcel. Argumentaron que una eventual condena no sería de ejecución condicional (sin encierro) y que entonces cabía mantenerlo preso, pues las maniobras que le atribuyen no son excarcelables y era necesario asegurarse que el caso llegue a una sentencia. Más aún cuando el procesamiento que le habían dictado no había sido cuestionado por la defensa.