Fuera de control. Todo indica que la mujer se salió de la calzada porque se descompensó cuando conducía su Ford Focus. Luego impactó contra un árbol y eso sellaría su fin.

Como todas las noches, Ana María Zavatarelli (69) salió de su trabajo en la farmacia "Nuevo Sagrado Corazón", en la intersección de Mariano Moreno y Avenida Rioja, en Santa Lucía. Probablemente iba pensando en el cumpleaños de uno de sus cuatro nietos, que iba a celebrarlo hoy con su familia. Pero el destino decidió que no sea así, porque cuando volvía a su casa a bordo de su automóvil, aparentemente una descompensación la sacó del camino y tras zigzaguear unos metros terminó estampada contra un árbol, en la esquina de una plaza. A pesar de que quedó consciente, falleció poco más de una hora después, mientras recibía atención médica en el Hospital Rawson, producto de un fuerte golpe en su tórax, dijeron fuentes policiales. 

El siniestro ocurrió alrededor de las 21.45 del pasado jueves, en calle Salvador María del Carril, al Norte de Córdoba. Por la primera calle en dirección al Norte circulaba a esa hora "Pilu", como cariñosamente la llamaban a la mujer sus conocidos. Hacía minutos había dejado su puesto de trabajo en la farmacia donde se desempeñaba como farmacéutica y volvía a su casa en calle Grígolo, al Sur de Narciso Laprida, en el barrio Las Moreras, en Santa Lucía, donde vivía con su esposo, Ramón Luberchi (74, jubilado), con quien tuvo dos hijas ya mayores. 

Sin embargo, pasando Córdoba, al parecer sufrió el percance y perdió el control de su Ford Focus que, tras zigzaguear unos metros y atropellar los pilares de cemento de contención de la plaza que rodean esas dos calles, terminó chocando contra un árbol. Según dijeron fuentes policiales, cuando llegaron al lugar la mujer aún estaba consciente y habría manifestado a los efectivos que se había descompuesto y que le dolía mucho el pecho porque se había golpeado contra el volante. 

Inmediatamente fue trasladada al Hospital Rawson, donde la dejaron en observación, pero alrededor de las 23 su cuerpo no resistió más y aquel fuerte golpe en su tórax terminaría por sellar su destino. "Era una excelente madre y abuela. Nosotros nos criamos prácticamente con ella y era una mujer muy buena y trabajadora", dijo uno de sus sobrinos, José Luis Colombo (53), todavía sin poder asimilar su partida.

La mujer sufría hipertensión y en la Policía creen que eso pudo provocar su descompostura. Cabe destacar que además tuvo poca suerte, porque el airbag sólo se accionó en el lado del acompañante, afirmaron voceros de la Fuerza.

Víctima. Ana María Zavatarelli no tuvo escapatoria.

El cadáver fue trasladado a la Morgue Judicial para que le practicaran la correspondiente autopsia.