Un trágico hecho de femicidio seguido de suicidio tuvo lugar en los alrededores de la localidad de Quines, ubicada al norte de la provincia San Luis. Allí, un exagente penitenciario ya retirado asesinó a su esposa y luego se cortó las venas dentro de su auto.

El autor del crimen fue identificado como Edgar Amaya, de 55 años, cuyo cuerpo sin vida fue hallado el martes 21 de agosto por la mañana en el interior del Volkswagen Bora de su propiedad, estacionado a unos 4 kilómetros del pueblo.

El episodio se destacó por lo sangriento, ya que Amaya se había cortado las venas con un cuchillo que fue encontrado dentro del mismo vehículo.

En tanto, el cadáver de su mujer, Dalinda Quevedo, de 53 años, se encontraba en medio de una zona rural a la vera de una ruta que dirige al paraje El Retamo. Ella se desempeñaba como empleada en un hospital y juntos tenían 3 hijos de entre 14 y 24 años.

Tras el rastrillaje que se inició para dar con el cuerpo de Quevedo, también se descubrió un hacha y un palo, ambos manchados con sangre. Según pudo saberse, la mujer murió luego de recibir un contundente golpe y hasta el momento intenta determinarse cuál de estas fue el arma homicida.

Según consta en la investigación, la pareja mantenía una relación conflictiva y tenían reiteradas peleas. Quevedo había denunciado a Amaya por violencia de género en varias oportunidades, pero -de acuerdo a los medios locales- terminaba retirando las denuncias y frenaba los expedientes abiertos.

Sin embargo, algunas presentaciones que realizó la mujer continuaron por su cauce y quedaron registrados en la comisaría 15 de Quines.