Un agente que estaba a cargo de los calabozos en la seccional 5ta, de Santa Lucía, será el único que enfrentará una investigación por facilitar con su actuación la fuga de dos presos de esa sede policial el pasado 2 de diciembre. Por ahora, el fiscal coordinador, Iván Grassi, y sus colaboradores en la UFI de Delitos Especiales, tienen elementos para sospechar que ese agente, identificado como Eduardo Andrés Gauna Rodríguez, facilitó el escape de Rodrigo Escalante y Facundo Bazán, por negligencia, es decir no intencionalmente y sí por un grosero descuido, pues dejó abierta la puerta del calabozo donde estaban detenidos.

Por eso Fiscalía ya pidió a un juez una audiencia para imputarle formalmente el delito de facilitación culposa de evasión a Gauna Rodríguez. De todos modos, según fuentes judiciales, la investigación está abierta y aún no se descarta que hubiera ocurrido un hecho más grave, como sería haber simulado un descuido para ocultar que realmente los quiso dejar escapar.

Evadido. Rodrigo Escalante

Todo pasó a las 10,42 de aquel sábado 2 de diciembre pasado, cuando el agente abrió la puerta del calabozo para darle la libertad a un grupo de contraventores, es decir personas que cometen faltas (no delitos). Una cámara interna de la propia seccional 5ta reveló que luego de sacar a los contraventores, no cerró con candado la puerta, situación que fue aprovechada por Escalante y Bazán. En las imágenes, se ve que uno de ellos se asoma para ver los movimientos, antes de salir con su cómplice rumbo a la cocina, para de allí ganar la calle.

De todos modos sus momentos de clandestinidad no duraron mucho. Bazán fue detenido durante la tarde de aquel sábado. Y Escalante tres días después, el martes.

Este último sospechoso estaba bajo la lupa en otra investigación: el robo de unos 60 millones de pesos (en moneda nacional y extranjera) perpetrado el 17 de octubre pasado por una banda en la firma Perforaciones Vaquer, apostada en Calle 13 en inmediaciones del cruce con Vidart, Pocito.

Esa vez la banda utilizó algún vehículo para cargar una caja fuerte con el dinero, pero en el Segundo Juzgado de Instrucción consideraron que las pruebas contra Escalante no fueron suficientes para sostener la sospecha en su contra. Y tanto él como otros cinco implicados (algunos parientes suyos), recuperaron la libertad por falta de pruebas.

En la audiencia para imputar al policía, el caso podría finalizar con una condena si es que Gauna Rodríguez admite su culpa y acuerda un juicio abreviado.