Por primera vez desde el retorno de la democracia y en consonancia con el calendario que se usa en otras partes del país, los diputados provinciales no estarán obligados a sesionar todos los jueves. Oficialistas y opositores quedaron ayer en que lo harán cuando tengan temas importantes y debidamente tratados en comisión o de acuerdo a la urgencia que requieran. El argumento oficial es que habrá más tiempo para debatir en comisión, que se podrán tratar los proyectos en profundidad y que sirve para evitar trabajos de apuro con tal de justificar la aprobación de una ley cada semana.

La medida se tomó por una resolución interna -no hace falta otro instrumento- y está a tono con la mayoría de las Legislaturas del país, que sesionan cada 15 días. Además, es similar a la que adoptó la Cámara de Diputados de la Nación para el periodo 2011: los legisladores nacionales, en lugar de sesionar todas las semanas, acordaron hacerlo al menos una vez al mes.

La posibilidad de flexibilizar el cronograma legislativo local suena desde año pasado, cuando el presidente de la Cámara de Diputados, Rubén Uñac, habló de sesionar cada 15 días y no todos los jueves. La idea encontró rápidamente eco entre los diputados de todos los bloques, pero el 2010 terminó con la misma frecuencia de sesiones y el tema quedó para más adelante.

Finalmente, en la sesión preparatoria de ayer (Ver Autoridades), los diputados avanzaron por unanimidad con un cambio de periodicidad. Resolvieron mantener el jueves como día de debate en el recinto y por primera vez, acordaron que en la reunión de Labor Parlamentaria que se hace los martes -participan los presidentes de bloque y Uñac-, se determinará si sesionan o no esa semana. La decisión se tomará de acuerdo a la importancia y la cantidad de despachos de comisión en carpeta y a las urgencias por sacar un proyecto.

De esta forma, queda abierta la posibilidad de que los diputados celebren menos sesiones que en años anteriores. Ya no tendrán el deber de reunirse sí o sí en la sala los jueves de cada semana, como se hacía desde 1983. Y por criterio propio, podrán postergar el plenario mientras consideren que no hay temas de peso que justifiquen convocar al cuerpo.

Uñac aseguró ayer que "no significa que necesariamente vamos a sesionar menos" y "no implica trabajar menos". El vicegobernador explicó que ahora "los diputados tendrán más tiempo para trabajar mejor en comisión y analizar los proyectos en profundidad, se va a ganar en calidad legislativa, las leyes más importantes son las que se han estudiado más tiempo en comisión".

Según Uñac, no se trata de una medida para sesionar lo menos posible. "Sesionaremos 3 o 4 veces al mes, cuando un jueves no se haga, seguro que para la otra semana habrá temas acumulados para citar a los diputados".

Uno de los legisladores apuntó en voz baja que sesionando sí o sí todos los jueves, hay muchos proyectos que se tratan livianamente en comisión para tener algo que debatir en el recinto y no exponerse a críticas. Después de tantos años, señaló que hay una abultada producción de leyes que no siempre hacen falta o que rápidamente se volvieron obsoletas.