Eduardo Olivera, exintegrante del Tribunal de Tasaciones y uno de los acusados en la megacausa de las expropiaciones, se presentó ante los magistrados de la Sala de juicio. Sucede que el imputado pegó el faltazo en la primera audiencia y la jueza Silvina Rosso había ordenado su detención. Su abogado defensor, Marcelo Salinas, había señalado que atraviesa problemas de salud y en el inicio del debate había ido a realizarse una tomografía. Ante ese cuadro, las autoridades judiciales ordenaron que se le realizara un examen médico, el cual indicó que Olivera no podía permanecer detenido, por lo que se dispuso su prisión domiciliaria. Así, es casi un hecho que el acusado se conectará hoy de manera remota en la reanudación del juicio, mientras que su abogado estará presente en la sala.