Legisladores radicales de ambas cámaras restaron ayer trascendencia al proyecto oficialista para modificar la ley de Acefalía, con el fin de recortar las facultades del vicepresidente, Julio Cobos, y consideraron que "no tiene ninguna posibilidad" de contar con los votos necesarios para su aprobación.
La iniciativa será presentada el 1 de marzo por la diputada ultrakirchnerista Diana Conti, según lo confirmó durante la reunión de la Comisión de Asuntos Constitucionales, pero el partido de Cobos lo analizó como una "chicana política" más que como una real preocupación.
"Eso es dejar de preocuparse por lo principal y seguir dando vueltas sobre lo accesorio", advirtió a DyN el jefe del bloque de Diputados de la UCR, Oscar Aguad, quien sostuvo que el proyecto "no tiene ninguna posibilidad de salir" con la nueva composición de ambas cámaras.
Además, Aguad defendió la figura del mendocino porque "ni Cobos ni ningún vice tiene ninguna chance de comprometer al Gobierno, más allá de sus propias funciones, que es reemplazar al presidente durante su ausencia".
El oficialismo propone modificar la ley 20.972 de acefalía, al incorporarle dos artículos: que el vicepresidente asuma el Poder Ejecutivo por vacancia transitoria del presidente, quedando sujeto a las instrucciones del primer mandatario, y el segundo, que el vicepresidente no deberá adoptar ninguna medida contraria a las políticas establecidas.
La Constitución Nacional contempla en su artículo 88 que el vicepresidente ejercerá el Poder Ejecutivo "en caso de enfermedad, ausencia de la Capital, muerte, renuncia o destitución del Presidente de la Nación", y por ello los radicales se mostraron molestos con la iniciativa, porque no respeta la normativa.
En ese contexto, el diputado cobista Mario Barbieri analizó que el proyecto "va en contra de la naturaleza misma de la Constitución del Estado, porque estaría debilitando las posibilidades de que el vice pudiera ejercer plenamente sus derechos, y sentaríamos un precedente malísimo para las instituciones".
La inquietud kirchnerista surgió luego de que la presidenta Cristina Fernández decidiera suspender en enero pasado un viaje de diez días a la China, ante el temor de que Cobos tomara alguna acción en contra del oficialismo en medio del conflicto del Banco Central. Sin embargo, en la bicameral Cobos votó por la destitución.
Miguel Giubergia, diputado radical por Jujuy, minimizó el proyecto de Conti y remarcó a esta agencia que la legisladora bonaerense "se debería dedicar a presentar iniciativas tendientes a controlar la utilización por parte del Gobierno de los recursos públicos que van a parar a la corrupción".
También se sumó a la polémica el senador por Río Negro, Pablo Verani, de buena llegada a Cobos, que reconoció que le daría "vergüenza" estar en el lugar del kirchnerismo discutiendo este proyecto y recalcó que no toma "en serio" la idea presentada por Conti.