Tras analizar las pruebas, la fiscal Claudia Salica endureció su postura, ya que le pidió al juez Correccional Alberto Caballero que procese al exmagistrado penal Pablo Flores por un delito más grave. Este último le había entregado, de manera irregular, una camioneta secuestrada al comisario Gustavo Padilla, quien la usó para fines personales, por lo que el exjuez estaba imputado por incumplir con sus deberes de funcionario público, delito que tiene penas de multa e inhabilitación. Pero la representante del Ministerio Público fue más allá y consideró que debe achacársele la figura de abuso de autoridad y violación de deberes, la que contempla un castigo de prisión, aunque en suspenso, e inhabilitación. Tras el planteo, la pelota quedó en el campo del titular del Primero Correccional.

En su escrito, Salica estableció las diferencias entre una y otra conducta delictiva. El cambio se debió a que el tipo penal del incumplimiento de los deberes de funcionario público (artículo 249 del Código Penal) comprende, de acuerdo a jurisprudencia, la negligencia en el desempeño de las tareas, mientras que en el abuso de autoridad y la violación de deberes "el hecho debe siempre revestir los caracteres de malicia".

El punto es central, ya que Flores resaltó en su indagatoria que cometió un error al cederle una Toyota Hilux a Padilla, declaración sobre la que la fiscal destacó que "carece de veracidad", por lo que apuntó a la figura más dura, la cual tiene penas de prisión que van de un mes a dos años de cárcel e inhabilitación para ejercer cargos públicos por el doble de tiempo.

De acuerdo al expediente, tras una denuncia, Flores ordenó la búsqueda y el secuestro de un vehículo el 7 de septiembre de 2017. En distintos operativos, la Policía recuperó distintas movilidades, entre las que se encontraba la Toyota Hilux, la que fue a parar al Depósito Judicial de 9 de Julio, área que estaba a cargo de Padilla. Por eso, "valiéndose" de su cargo, el comisario comenzó a obtener información sobre el estado en el que se encontraba la movilidad desde el 4 de abril del año pasado, según remarcó Salica. Así fue que el uniformado le solicitó al entonces juez que le entregara la camioneta como depositario judicial.

En primer lugar, la fiscal resaltó que, desde el 10 de octubre de 2017 (a un mes del secuestro), Flores "contaba con elementos que lo obligaban a declarar su incompetencia", dado que el título de propiedad, la cédula verde y la cédula de autorizado de la Toyota eran apócrifas, por lo que debió haber pasado el expediente a la Justicia Federal para que se investigaran tales adulteraciones.

Luego de que Padilla le solicitara la movilidad, el exjuez se la entregó el 23 de mayo de 2019. Así, Flores incurrió en una irregularidad, ya que la disposición de los vehículos es una facultad exclusiva de la Corte de Justicia, en beneficio de instituciones y para fines específicos, de acuerdo al Código Procesal Penal, remarcó Salica. Además, indicó que otro punto de la normativa establece que un tribunal puede entregar efectos "provisoriamente" a quien "acredite tener derechos sobre ellos", cosa que el comisario no cumplía.

La fiscal también reflejó la parte de la declaración de Flores en la que había señalado que no conocía a Padilla. Sin embargo, la contrapuso con la manifestación del propio comisario, quien había dicho que conocía al exjuez. Inclusive, una empleada había señalado que vio al comisario entrar varias veces al despacho del entonces magistrado. Además, Salica hizo hincapié en que Flores firmó la resolución de entrega de la Toyota y que no lo delegó en su personal.

Una dupla bajo la lupa

Por la Toyota

La jueza Correccional Mónica Lucero realizará el juicio contra el comisario Gustavo Padilla, quien consiguió la Toyota Hilux para fines laborales y la usó para pasear con amigos en el campo.

Por un Corsa

Padilla fue procesado en el Segundo de Instrucción por quedarse con un Corsa luego de haber engañado a su titular y haberlo retirado con un acta con una firma falsificada.

Autopartes

El comisario fue procesado en el Quinto de Instrucción por sacarle autopartes a un Peugeot 206. Hubo videos y uno registró cuando usaba una llave cruz sobre la rueda trasera de un Fiat 147.

Jury

Pablo Flores fue sometido a un Jury de Enjuiciamiento por su actuación irregular. El proceso tenía como fin su remoción para que pudiera ser indagado, ya que, como juez, contaba con fueros.

Sanción

En 2018, la Corte había sancionado a Flores con una suspensión por 30 días sin goce de haberes tras una auditoría que reveló demoras e irregularidades en más de 60 expedientes

Salud

Desde que estalló el escándalo con Padilla, Flores había conseguido una licencia por problemas cardíacos y psicológicos. Por eso, había solicitado la suspensión del Jury, pero no tuvo eco.