Entre la semana pasada y hoy, la ministra de Hacienda Marisa López se vio las caras con cada uno de los representantes gremiales de los empleados estatales. Luego de escuchar a cada uno, la funcionaria le puso porcentaje a la propuesta oficial salarial: un 50% de incremento que viene a cubrir lo que perdió el sueldo con respecto a la inflación en 2020 y al menos el primer tramo del 2021.

López dijo que se trata de "una propuesta superadora" que, si bien se sabe dejó buen semblante en los gremialistas, la deberán bajar a las bases y esperar la respuesta. La funcionaria no dijo si habrá otra propuesta en el caso que la rechacen o si esta es la última.

El plan oficial que pusieron sobre la mesa las autoridades es aplicar un 30% de suba en marzo; un 7% en mayo; otro 6% en el mes de julio y el restante 7% en octubre. Hasta ahora, el Gobierno sólo les había propuesto a los gremios recomponer lo que quedó de saldo del año anterior.

Ese 50% puede engordarse en julio. Es que habrá una revisión del acuerdo en ese mes para observar si lo resuelto ahora -en el caso que acepten el ofrecimiento, claro- alcanza para cubrir esa tan mentada premisa oficial de que los salarios le ganen a la inflación.