Los intendentes tienen tiempo hasta el 31 de este mes para presentar los proyectos de obras para conseguir financiamiento del Fondo de Desarrollo Regional (Fodere) de la provincia, el cual, para este año, tiene previsto un total de cerca de 373 millones de pesos, un incremento del 26 por ciento con respecto a 2020, por lo que quedó cerca de la inflación anual, calculada en el 29 por ciento. Además, los jefes comunales contarán este año con una ayuda para conseguir los recursos. Para acceder al Fodere, cada gestión municipal debe cumplir con una serie de exigencias y una de ellas es que el gasto corriente del año pasado no debe superar el nivel de inflación del mismo período, que fue del 36,1. El auxilio viene dado en que se les permitirá descontar de las erogaciones todas aquellas que se produjeron para atender las cuestiones sanitarias y de asistencia social por la pandemia del coronavirus, lo que les permitirá reducir gastos y estar a tono con el nivel del índice de precios.

El Fodere es importante para los municipios, ya que representa una fuente de financiamiento extra para la ejecución de obras que reclaman los vecinos, como iluminación, pavimentación y remodelación o construcción de plazas, entre otras. ¿Cómo se constituye? La provincia destina un porcentaje de los ingresos nacionales y de recaudación local a la masa de coparticipación comunal, de la cual, al Fodere va el 3 por ciento y, para este año, están previstos 372.744.096 pesos. Como está atado a los vaivenes de la percepción de los impuestos nacionales y provinciales, la partida aumentará si la recaudación es buena o bajará si es mala. Por ejemplo, en 2020 se había estimado que tendría recursos por 295.635.919 pesos, pero en un año de crisis marcado por el parate, durante un prolongado tiempo, de la actividad económica por la cuarentena, lo que efectivamente se acumuló fue de 268.389.011, es decir, un 9,2 por ciento menos. Cada municipio tiene un cupo asignado de los casi 373 millones de pesos de este año, de acuerdo a sus índices de coparticipación. Para conseguirlo, los intendentes deben cumplir con ciertas pautas fiscales. Una de ellas es la contención del gasto público, pero, este año, se les permitirá deducir las erogaciones efectuadas para enfrentar la pandemia, como las compras destinadas a insumos sanitarios y de asistencia social, explicó el secretario de Hacienda, Gerardo Torrent, quien agregó que, mientras Nación suspendió el cumplimiento de requisitos de la ley de responsabilidad fiscal para las provincias, en San Juan siguen en pie, pero con un alivio para las comunas. Otras exigencias son que los municipios deben mantener la relación entre población y cargos ocupados al 30 de julio de 2018 y que no pueden endeudarse en más del 10 por ciento de los recursos corrientes previstos para el ejercicio, cosa que no sucede con ninguno.

Los jefes comunales presentaron la información a fines de febrero y, ahora, el Ministerio de Hacienda, a cargo de Marisa López, debe evaluar que los equipos municipales cumplan con los requisitos, mientras que desde el Ministerio de Obras Públicas analizarán la factibilidad técnica de los proyectos que presenten hasta fin de este mes.

Además de los 268.389.011 pesos que hubo en 2020, el Fodere se nutrió de 220.220.807 pesos que no se usaron en 2019. Del total, 100 millones se destinaron para enfrentar gastos por la pandemia y 228.700.000 pesos se transfirieron para la ejecución de las obras, por lo que quedan casi 160 millones de pesos.

Incumplidor

El municipio de Zonda, bajo la gestión del bloquista Miguel Atampiz, no cumplió con pautas fiscales el año pasado, por lo que perdió el cupo del Fondo de Desarrollo Regional (Fodere), el cual fue distribuido en el resto de las comunas, tal cual establece la normativa.

Ingreso

75  millones de pesos habían ingresado al Fodere al 19 de marzo. En el año están previstos 373 millones.