La diplomatura en oralidad en los fueros Civil, Laboral y Penal que llevó adelante la Corte de Justicia local contó, para su cierre, con un alto funcionario del Poder Judicial Nacional. Carlos Mahiques es miembro del tribunal penal más importante del país, sólo por debajo de la Corte Suprema. En diálogo en exclusiva con DIARIO DE CUYO, habló de cómo los jueces no deben ser influenciados por los medios, la sociedad y los poderes políticos de turno. Por otro lado, criticó a voces kirchneristas que propusieron una nueva Constitución sin el Poder Judicial. No quiso opinar sobre la polémica entre la Corte y el juicio que el martes arranca contra Cristina Fernández de Kirchner, pero sí sostuvo que hay jueces de Comodoro Py que han favorecido "a la política". 

- ¿Cree que la Corte quiso salvar a la expresidente de ir a juicio?

- Los jueces no debemos ni podemos opinar sobre causas que están en trámite, mucho menos si está por iniciarse el juicio. Tampoco se puede opinar de causas que están en otros tribunales con colegas interviniendo. La Corte tiene facultades para pedir documentación anexa, ampliatoria, cuando tiene que resolver un tema en particular como un recurso de queja. No puedo hacer un juicio acerca de la oportunidad o de la conveniencia, muchos menos de la intencionalidad, que no sé si tampoco la hubo.

- ¿Es común que la Corte requiera un expediente para resolver un recurso?

- Hay situaciones que he visto y sabido que la Corte los requiere, como lo hacemos nosotros en Casación. No sé si es frecuente para la Corte, pero sí es posible. 

- Ante la queja de la ciudadanía y del Gobierno, la Corte dio marcha atrás. ¿Eso tiñe aún más la mala imagen del Poder Judicial? 

- Si un tribunal pide una documentación, lo hace fundadamente. Los jueces, además de tener una tarea, tenemos un compromiso. Ese compromiso es de ser guardianes de las primeras promesas, que son las promesas establecidas en la Constitución. Somos guardianes de esa legalidad. Cuando uno cumple esta función, no le tiene que importar, primariamente, la opinión pública. La opinión pública es un reflejo de lo que los medios pueden generar. Uno tiene que dictar un fallo no para agradar ni para concitar adhesiones, sino para restablecer los equilibrios alterados en una causa. Muchas veces eso se comprende y otras no. La legitimidad de los jueces, la que la sociedad reclama, no es tanto resolver grandilocuentemente una causa sino resolver prudente y silenciosamente aquellas que requieren ser resueltas. Muchas veces, esa no comprensión de las decisiones de la Justicia, aporta a la mala imagen. Los jueces no podemos estar pendientes de la imagen. 

"Nadie va a votar una reforma constitucional que desconozca al sistema democrático"


- ¿Usted dice que los jueces deben abstraerse del humor social para resolver de la mejor manera?

- De la manera más justa posible. Como jueces profesionales, no podemos dejarnos invadir o ser susceptibles a la presión de poderes como los medios. A veces, los tiempos, la lógica y el objetivo de un proceso no se corresponde con los tiempos, la lógica y los objetivos de quién informa y entretiene. Los jueces no podemos estar con actitudes mediáticas, ni los medios pueden subrogarse la función de jueces. 

- Hace pocos días, un periodista ligado al kirchnerismo dijo que están trabajando en una nueva Constitución Nacional sin el Poder Judicial...

- Convertir a un poder del Estado en un mero servicio público no es sólo degradar y desvirtuar los principios que fundaron esta Nación y esta república, es poner en riesgo a toda la ciudadanía de vivir en un Estado sin garantías y sin seguridad jurídica. Esto está en los límites de un régimen autoritario y autocrático. No conozco un régimen así en un país civilizado. Se integraría todo al Poder Ejecutivo que administraría, implementaría y ejecutaría sus propias decisiones en función de sus designios, no en función de las leyes ni los preceptos constitucionales, ni de las garantías. Integrar la Justicia al Ejecutivo es de un régimen autoritario. Me parece que es un ejercicio dialéctico prerevolucionario y propagandístico, pero que carece absolutamente de realismo. 

- El fiscal General de la Corte local, Eduardo Quattropani dijo en una entrevista que la Justicia de Comodoro Py es un poder propiamente dicho y que condiciona a todo gobierno de turno. ¿Es así?

- No. Sí creo que ha habido en el tiempo y en determinadas causas magistrados que han tenido un desempeño objetable. Hay jueces que con sus fallos han favorecido a la política.

- ¿Quiénes?

- No quiero dar nombres, pero todos podemos presumir de quién se trata. Hay otros que no son tan conocidos, pero que también cumplen ese mismo rol. En la Justicia Federal se tratan muchas causas de corrupción en las que están entramados los poderes políticos. En esas causas, como juez, tengo que conocer que hay política adentro, pero lo que no puedo hacer es empastarme con la política y ser un protagonista más de ese entramado, donde mi beneficio personal constituye una variable en la decisión judicial.



- Pero hay jueces que utilizan su poder para avanzar en una causa o postergar un fallo porque conviene... 

- Ese es un concepto de oportunismo político. El juez puede tener cierta discrecionalidad para resolver determinadas cosas en determinado tiempo. Lo que no puede hacerlo es en beneficio propio o para alguna de las partes. No se puede fallar para ver quién gana las elecciones y de esa manera yo sé dónde voy a estar mejor parado o para que halague al poder de turno. 

- ¿Qué les contesta a quienes dicen que usted y su familia es macrista? Usted fue funcionario de María Eugenia Vidal y su hijo trabaja con el ministro de Justicia Garavano. 

- No soy macrista. Una cosa es prestar un servicio público en un determinado gobierno y otra es adherir ideológica o partisanamente a ese gobierno. Yo no tuve militancia política. A mí me convocaron no por ser del PRO ni por ser del peronismo. De hecho, mi designación ante la Cámara de Casación Penal la hizo la expresidente y mi hijo (Ignacio) que es fiscal Federal, también fue designado por la anterior administración. Yo presto servicio cuando me convocan y si sé que puedo aportar algo. Conozco mucho la realidad penitenciaria y, con ese propósito, me convocó la gobernadora Vidal. Que tengamos tres apellidos Mahiques en distintos poderes, uno está en el Ejecutivo (Juan Bautista es subsecretario del Ministerio de Justicia que conduce Germán Garavano y ha sido propuesto para ser fiscal General de Buenos Aires), otro en el Ministerio Público (Ignacio es fiscal Federal y está propuesto como juez Federal en una localidad de Buenos Aires) y yo en el Judicial, surge de un mérito, una elección y un ejercicio profesional que es autónomo. 

"Los jueces tenemos que permanecer ajenos a consideraciones políticas y partidocráticas"


- Las provincias están avanzando a la investigación fiscal. Hay quienes dicen que en Comodoro Py no quieren avanzar porque eso les quita poder a los jueces... 

- Se dice que todo el poder está concentrado en Comodoro Py. No lo veo así. En el caso del sistema acusatorio, no les quita poder a los jueces, lo redistribuye, deriva una mayor discrecionalidad al fiscal en la fase investigativa. El nuevo Código Procesal Penal nacional establece la puesta en marcha del sistema acusatorio, está sancionado y va a tener una implementación gradual y progresiva en todo el país y, eventualmente, llegará a Comodoro Py. La investigación fiscal federal arranca el 10 de junio en Salta y Jujuy y para 2025 todo el país va a estar integrado con el mismo régimen procesal.