Los abogados de Energía San Juan y los del municipio de Chimbas volvieron a verse las caras, ahora en sede judicial, e insistieron en sus respectivas posturas: desligarse de la responsabilidad por el cable de una farola que le produjo una descarga eléctrica fulminante a Lautaro Bustos, de 10 años, y achacarle la culpa al otro por el mantenimiento. En juego hay una demanda por daños y perjuicios promovida por José Carrizo, abogado de los padres del niño, que le apuntó a la empresa y a la comuna por una indemnización de 3,5 millones de pesos más intereses desde el accidente, por lo que, a la fecha, superaría por poco los 5 millones de pesos. No obstante, si no hay acuerdo entre las partes, será la jueza Adriana Tettamanti, del Contencioso Administrativo, la que definirá si, primero, le hace lugar al reclamo y, después, quiénes tienen responsabilidad y el valor de la compensación.

La muerte de Lautaro se produjo el 18 de noviembre de 2018, luego de que se electrocutara al tomar contacto con un cable caído de una farola en la puerta del club San Pedro, en Chimbas (Ver recuadro). Su familia entabló la demanda y, en la instancia previa, se dio la audiencia de mediación obligatoria, la cual fracasó. Luego de las restricciones por la cuarentena por el coronavirus, el martes se llevó a cabo la audiencia inicial en el juzgado y Energía San Juan y el municipio mantuvieron sus posturas, por lo que no hubo acuerdo y se abrió la etapa de presentación de pruebas.

En líneas generales, la distribuidora de electricidad sostiene que el cable que tocó la víctima es de propiedad de la comuna, ya que corresponde a una instalación de alumbrado público. En ese marco, los abogados indicaron que el mantenimiento está a cargo del municipio, dado que cobra las tasas de ese servicio para llevar a cabo las tareas de conservación y seguridad.

Por su parte, el intendente Fabián Gramajo evitó opinar del tema debido a que está judicializado y por respeto a la familia. De todas formas, las abogadas Natacha Garay y Sandra Leveque, que representan a la comuna, destacaron en la contestación de la demanda que el cable del tendido de la red de distribución de electricidad pertenece a Energía San Juan. Que si bien existe una farola que da a la vía pública, eso no quiere decir que sea del alumbrado público. De hecho, el abastecimiento de la luminaria viene "de la línea de tensión de la red de distribución domiciliaria, que es la misma que abastece a los vecinos de calle Benavídez". Además, resaltaron que el montaje, el mantenimiento, el control, la reparación y sustitución pertenece a la compañía, cuyos operarios fueron "los únicos que tomaron contacto con el tendido, cortaron el suministro" y retiraron el cable, lo que revela la propiedad. Y también que la farola estaba sujeta a un pilar que pertenece al posteado de la red de distribución.

Carrizo, el abogado de la familia de Lautaro, contó que Energía San Juan no quería conciliar, pese a que Mapfre, la aseguradora, quería hacer una propuesta económica, aunque apostaba a que en el municipio también hiciera su aporte. Pero como las posturas, por ahora, son indeclinables, la jueza decidió abrir la etapa de prueba para luego entrar a resolver la causa. No obstante, las partes pueden llegar a un arreglo en cualquier instancia del proceso.

Para fijar el reclamo indemnizatorio, el demandante hizo hincapié en ítems como el llamado "pérdida de chance", el reclamo de los padres por la pérdida de una ayuda futura; daño psicológico y moral para sus familiares y el valor vida.

Instancias

Investigación penal

Tras la muerte de Lautaro Bustos, se desencadenó la investigación penal para establecer si hay algún responsable de un delito. El juez Matías Parrón, del Quinto Correccional, indagó al secretario de Obras del municipio, Alberto Herrera, pero aún no resolvió su situación procesal, indicaron fuentes judiciales.

Demanda

El 26 de diciembre de 2018, el abogado José Carrizo entabló la demanda civil contra Energía San Juan y el municipio de Chimbas. El reclamo es por una indemnización por 3,5 millones de pesos. No obstante, será la jueza la que determine el monto y los responsables, si así lo considera en base a las pruebas.

Contestaciones

Tanto Energía San Juan como el municipio de Chimbas se desligaron de responsabilidad y le echan la culpa al otro por la propiedad y mantenimiento del cable eléctrico. Mantuvieron sus posturas en la audiencia de mediación obligatoria y en la audiencia inicial en el juzgado.

Chapuzón y tragedia


Lautaro Bustos era el mayor de dos hermanos y el día de la tragedia había ido al club San Pedro, de avenida Benavídez, metros al Oeste de Oratorio, a ver un partido con su abuelo. Pero en un momento salió con dos amiguitos a refrescarse en un pequeño canal que pasa por la puerta del predio, sin imaginarse jamás que su suerte iba a quedar echada para siempre. Al parecer, cuando los otros menores se metieron al club a secarse, el niño habría intentado un último chapuzón, pero con tanta poca suerte que resbaló antes de la zambullida y, de manera instintiva, se aferró del cable. La descarga lo mató en el acto.

Además del dolor, los familiares estaban indignados por la tragedia (foto). El padre, Juan Bustos, había dicho que "acá hubo un culpable. Alguien se tiene que hacer cargo. Esperaron a que muriera mi hijo para ir a arreglar el cable. Son unos desgraciados. Es mucho el odio que tengo porque nadie me lo va a devolver, pero quiero que paguen los responsables".