Pamela Anderson fue uno de los principales íconos femeninos de la década del 90, todo ello gracias a su papel principal en la serie Baywatch. Su inigualable sensualidad, su traje de baño rojo, y su memorable elenco de salvavidas despegaron su fama internacional, la cual persiste en la actualidad. Fue 15 veces tapa de Playboy y hasta llegó a protagonizar una portada de Vogue.

Sin embargo, a lo largo de los años ha ido dejando de lado su faceta como modelo y figura hot, inclinándose hacia el activismo. Es una de las celebridades más comprometidas con la lucha a favor del medio ambiente; ha demostrado su repulsión hacia el maltrato animal, y defiende apasionadamente los derechos de las mujeres a través del movimiento #MeToo.

Hace unas horas, para sorpresa de muchos, la actriz de 52 años rememoró sus días como guardavidas, posando para un comercial de Ultra Tune en una playa australiana de aguas cristalinas. Mostró sus imponentes curvas en un traje de neoprene negro, cuyo cierre abierto hacía las veces de un arriesgado escote. En cuanto al maquillaje, apostó por un oscuro delineado, y enfatizó sus pómulos con tonalidades rosadas, tal como solía hacerlo durante cada episodio de Baywatch.