-¿Por qué Salud Pública está tan interesada en mejorar la situación de salud mental en la provincia de San Juan?

-Por pedido expreso del gobernador y por un diagnóstico que hicimos nosotros, entendimos que la salud mental estaba relegada en la provincia. Debemos entender que el ser humano es un todo: cuerpo, mente y alma. Por eso nuestra misión y proyecto principal de salud mental es darle la jerarquía que necesita. Queremos que la salud mental alcance los mismos niveles que posee la salud corporal. 

-¿Cómo se jerarquiza la salud mental en San Juan?

-Básicamente hemos empezado una serie de procesos con todo el equipo de trabajo. Por una parte, la realización de registros y datos estadísticos en materia de salud mental, cosa que anteriormente no se hacía. El año pasado inauguró el Centro Terapéutico para niños y jóvenes con problemas de autismo y psicosis.

Actualmente se están desarrollando las tareas de refuncionalización del hospital neuropsiquiátrico y en tres meses esperamos poner en funcionamiento el nuevo servicio de Psiquiatría Infanto-Juvenil del Hospital Marcial Quiroga.

A lo que se suma un gran número de capacitaciones para los 200 trabajadores que tenemos en el área, contando que vamos a necesitar sumar cada vez más profesionales, para dar esta contención multidisciplinar que proponemos. 

-¿Qué tareas se están desarrollando en el Hospital Mental y para cuando estará lista la obra?

-Cuando entramos en gestión nos encontramos con un neuropsiquiátrico en situación extrema. Por eso contratamos seguridad perimetral, pintamos, arreglamos baños y pusimos dos containers que funcionan actualmente como salas de rehabilitación.

Mientras tanto, se realizan las tareas de refuncionalización de todo el establecimiento. Es una inversión de 197 millones de pesos aportados íntegramente por la provincia, para una obra que estará lista en 18 meses. 

-¿Qué cambiará en ese hospital?

-Básicamente todo, sólo va a quedar en pie uno de los pabellones que existían anteriormente. Todo lo demás cambia, porque se va a construir un hospital polivalente, debido al aumento de pacientes y a la necesidad de tratamientos de salud integrales.

Estamos creando más espacios para darles mayor contención y mejor calidad a todos los pacientes con desórdenes mentales. Lo que va a implicar sumar más personal y abordar integralmente desde lo psicológico, kinesiológico, psiquiátrico, fonoudiológico, etc.

 -¿Qué significa que un hospital pase a ser polivalente?

-Significa que dejará de ser un hospital monovalente con un gran número de pacientes psiquiátricos crónicos. Esto se dio así porque era el único lugar de San Juan y el más antiguo, que acumulaba pacientes por su capacidad, creo que actualmente hay 80 personas internadas.

La nueva ley de salud mental propone que no existan más los hospitales neuropsiquiátricos hacia 2020. La intención es que se convierta en un hospital integral (que posea médicos clínicos, psicólogos, fonoudiólogos, como si fuera el Hospital Rawson) para que toda la población circundante pueda utilizarlo. La idea no es crear más lugar para tener más camas para pacientes con problemas mentales, sino tener un lugar para que todos puedan tratar sus afecciones de manera multidisciplinar. 

-¿Este abordaje también se va a aplicar en el nuevo servicio de Psiquiatría Infanto-Juvenil del Marcial Quiroga?

-Claro que sí, el proyecto en el que venimos trabajando hace un año es muy amplio e implica el trabajo conjunto de profesionales como médicos, psicólogos, psiquiatras, kinesiólogos, fonoudiólogos, psicopedagogos, asistentes sociales, etc.

Es una propuesta nueva que viene a resolver la problemática de atención psiquiátrica de niños y adolescentes, porque antes se hacían atender pero por profesionales aislados, o viajaban a otras provincias. En este caso va a haber una opinión médica interdisciplinaria única. 

-Este año la OMS tomó la depresión como eje central del Día Mundial de la Salud. Y según los datos de Salud Pública, el grupo más vulnerable y afectado por esta patología en San Juan es el de adolescentes y jóvenes. ¿A qué se debe? 

-La depresión es una patología que afecta a toda la comunidad y en especial a los adolescentes y jóvenes, incluso la OMS ha integrado a los niños como grupo de riesgo. La gran cantidad de presiones que tienen los jóvenes actualmente, sumado al avasallamiento tecnológico y la falta de contención familiar, deriva en el aumento de la depresión y consecuentemente en un aumento de la tasa de suicidio. 

-¿Cómo se combate esta patología en un grupo etario que posee la tasa de suicidio e intentos de suicidios más alta de la provincia?

-De manera interdisciplinaria, abordando los problemas psicológicos y psiquiátricos desde una concepción integral de la medicina, creando nuevos espacios, es lo que estamos haciendo actualmente. Históricamente el tema suicidio ha sido un tabú y la depresión se asociaba con locura. Hoy tenemos registros, tenemos contención y el tema está instaurado en la sociedad, nosotros debemos capitalizar eso para darle a la salud mental de nuestros jóvenes y adolescentes la importancia que se merece.