Expectativa, ansiedad y sonrisas reinaban entre los primeros fanáticos en llegar a las sillas ubicadas frente al Escenario San Juan de la Feria y Exposición Temática de la Fiesta del Sol, antes de que subiera a escena el mexicano Carlos Rivera.

Entre el público, conformado principalmente por mujeres, se vio gente de todas las edades. Y muchas de las fanáticas se prepararon entonando las canciones más conocidas.


 

“Hace una hora que estamos sentadas esperando. Nosotras fuimos el domingo antes de que arrancara la venta de entradas a las 10 y pasamos todo el día y la noche en el Teatro del Bicentenario para comprar las mejores ubicaciones. Estamos muy emocionadas”, contó Sandra Fernández, quien llegó junto a sus hijas Nazarena y Daniela.


 

Lo mismo hicieron las tres hermanas Elisa, Lorena y Silvia para comprar sus tickets. A las tribunas llegaron acompañadas por Gonzalo, el esposo de una de ellas, uno de los pocos hombres que se veía entre las primeras filas.


 

Entre el público también hubo muchos grupos de amigas. Como Aldana, Graciela, Silvia, Mariela, Silvina y Verónica, de entre 26 y 60 años, quien no pudieron ocultar su emoción. “Estamos muy ansiosas”, reveló Aldana.


 

Atrás estaba Sandra, de 54 años, junto a su hermana Moira de 59. Ella se autoproclamó como una de las primeras sanjuaninas en conocer y admirar al mexicano. “Yo lo escuché hace años y me encantó. Después fui a México y allá se escucha muchísimo. Siempre me dije, ‘va a venir a San Juan y yo no me lo voy a perder’. Acá estoy”, contó la fanática entusiasmada.