A Helen le preocupaba mucho no poder resistir tantas horas sin probar bocado. Le resultó bastante difícil, pero no imposible. Y ahora que ve los resultados positivos que obtuvo con su sacrificio no se arrepiente de haber puesto en práctica la nueva dieta que está de moda y que propone dejar de comer por varias horas al día para adelgazar. Logró bajar 15 kilos en dos meses y medio con el llamado ayuno intermitente que genera opiniones encontradas. Algunos especialistas se oponen a este tipo de dietas por considerarla peligrosa para la salud, mientras que otros la recomiendan pero bajo un estricto control médico. Estas posturas opuestas surgen luego de que esta propuesta se transformara en furor en los últimos tiempos, se promocione a través de las redes sociales y de que muchas personas la practiquen siguiendo sólo las recomendaciones que encuentra en Internet y sin supervisión médica.

En una de las tantas páginas webs que hablan sobre esta dieta, dicen que su principio básico consiste en ayunar por varias horas diarias para que el cuerpo se alimente de las grasas acumuladas en el organismo y, de esta manera, eliminarlas al transformarlas en energía. Éste es uno de los puntos que divide las aguas con respecto a esta propuesta. "Yo he comprobado que este método sí da resultados y en poco tiempo. Si bien me costó al principio dominar la ansiedad por comer, con el paso de los días se me acostumbró el estómago y no me resultó difícil seguir con la dieta que efectivamente quema grasas. Lo bueno de esta dieta también que uno la puede dejar de hacer cuando quiera y sin que provoque el tan temido efecto rebote. Al menos eso es lo que yo experimenté", sostuvo Helen Aballay, la joven usa el ayuno intermitente como alternativa para bajar de peso.

Sin embargo, Ana Paola Fernández, licenciada en Nutrición y presidenta de la Asociación Sanjuanina de Nutrición, dijo que aún no hay estudios científicos que avalen los beneficios que brinda este tipo de dietas en comparación con una alimentación tradicional, equilibrada y saludable. Y que se opone a su práctica, sobre todo sin supervisión de un especialista, por considerarla riesgosa para la salud. "Los estudios realizados sobre la dieta del ayuno intermitente dicen que hay una reducción de peso corporal mayormente por la reducción de la ingesta calórica. Es decir que una alimentación equilibrada y saludable, que también tenga una adecuada ingesta de calorías y nutrientes, va a tener los mismos resultados que ofrece esta propuesta y sin poner en riesgo la salud de la persona. No es recomendable hacer esta dieta por voluntad propia y sin asesoramiento profesional, ya que puede ocasionar más perjuicios que beneficios", sostuvo la especialista.

Para Noemí Martín de Uzair, también licenciada en Nutrición, el ayuno intermitente sí es una opción efectiva y saludable para bajar de peso. Agregó que ella ya la indicó a varios pacientes con esta necesidad, pero tomando algunos recaudos necesarios. Dijo que este tipo de dietas sólo se debe aplicar a personas que no tengan otras patologías de base como diabetes o hipertensión y bajo un estricto control. "Yo no me opongo al ayuno intermitente y lo considero una buena opción para bajar de peso y hasta para desintoxicar el organismo, siempre y cuando sea indicado por un profesional preparado en el tema. El año pasado hice varios cursos online sobre este tipo de dietas con especialistas de otros países por eso sé a quién puedo indicársela y a quién no", sostuvo la especialista, que tiene una visión distinta a su colega.

La profesional contó que ella aplica el plan 8/16 de esta dieta que incluye 8 horas de comida alternadas con 16 de ayuno diario con monitoreo virtual permanente del paciente mientras ayuna para detectar cualquier trastorno que pueda ocasionar la falta de ingesta de alimentos. Luego, realiza un control presencial semanal para evaluar su condición y avances que tuvo la persona que se sometió al procedimiento médico.

Por los trastornos de salud que le generaba el sobrepeso, fue que Helen Aballay comenzó a realizar una caminata diaria para adelgazar. Pero, por la pandemia tuvo que abandonar esta rutina, aunque no bajó los brazos para conseguir su objetivo. Por las redes sociales se enteró de la dieta del ayuno intermitente y la puso en práctica sin sufrir ningún trastorno de salud según dijo. "Comencé a deprimirme al verme tan gorda por eso intenté revertir la situación con el ayuno. Ya alcancé el peso normal, pero sigo haciendo la dieta de vez en cuando para mantenerlo", dijo la joven.

Desde Salud Pública dijeron que durante la cuarentena aumentó la cantidad de casos de sobrepeso y obesidad por el sedentarismo que generó el encierro, y también la búsqueda desesperada de una opción para adelgazar rápidamente. Y que fue esta búsqueda la que transformó en furor la dieta del ayuno intermitente, principalmente porque la gente cree que la puede hacer sin asesoramiento profesional. "Conozco de esta dieta porque está de moda y la promocionan en las redes sociales. Si bien hay colegas que la recomiendan, yo no lo hago porque la considero tan peligrosa como la automedicación. Desde el ámbito de Salud Pública hacemos hincapié en un plan de alimentación saludable que incluya los 7 grupos de alimentos, y adecuada a cada etapa de la vida y a la condición de cada persona, para adelgazar. Este tipo de dietas se hace por tiempo determinado, porque no podés ayunar toda la vida, y por lo tanto los resultados no son definitivos. En cambio, si se adquieren y practican hábitos saludables se puede bajar de peso y mantener esta condición de manera sana y definitiva", sostuvo Érica García, al frente del área de Nutrición del Ministerio de Salud Pública de la provincia de San Juan.

La funcionaria agregó que dejar de comer durante horas para adelgazar o comer sólo determinado grupo de alimentos como proponen otras dietas, pueden generar nuevas patologías o agravar las ya existentes. También enfatizó que es muy importante que las personas esperen a tener sobrepeso u obesidad para buscar ayuda profesional. Dijo que también es fundamental realizar una consulta preventiva cada cierta cantidad de tiempo.


La experiencia por dentro


Helen Aballay, tiene 42 años y es mamá de tres hijos. Fue una de las tantas personas que hizo la dieta del desayuno intermitente para adelgazar. Dijo que cuesta hacerla, pero que la recomienda por los buenos resultados que obtuvo. "Empecé a hacer esta dieta sola, sin consultar a un nutricionista o médico. Sólo tuve que buscar en Internet cómo hacerla y elegir qué plan de ayuno seguir porque las propuestas son dejar de comer por 6, 8, 12 y hasta 16 horas. Yo elegí el más duro. Al principio me costó bastante acostumbrarme a no comer porque sentía hambre, pero comencé a hacer diferentes cosas en la casa para mantener mi mente ocupada y no pensar en la comida. Luego me acostumbre a la rutina. Desayunaba una taza de té o mate cocido, sola y con azúcar para mantenerme con energía. Después tomaba mate con edulcorante hasta la hora del almuerzo donde comía un plato sustancioso y nutritivo. Continuaba con el mate solo hasta la cena cuando consumía una taza de leche o yogur con cereales. Ese era mi plan de alimentación. Y lo alternaba con ejercicios cardio sin sentirme mal en ningún momento. Cuando empecé la dieta pesaba 75 kilos y ahora peso 60. Para estar tranquila me hice unos análisis de control y todo está bien, no tengo ni anemia. Sé que el ayuno intermitente genera muchas críticas porque los médicos y especialista lo consideran un peligro para la salud. A mí, por el contrario, me la mejoró. Adelgacé y terminó el dolor de columna y piernas que me provocaba el sobrepeso", dijo la mujer.

Resultados de investigaciones

Las investigaciones sobre la dieta del ayuno intermitente son limitadas, según una publicación en la revista Medical News Today. Un estudio con la participación de 107 mujeres con sobrepeso u obesidad encontró que tanto restringir las calorías dos veces a la semana como restringirlas de forma continua conducían a una pérdida de peso similar. También se encontró que esta dieta redujo los niveles de insulina y mejoró la sensibilidad a la insulina entre las personas que participaron del estudio internacional.

Otro de los estudios científicos analizó los efectos de este estilo de ayuno en 23 mujeres con sobrepeso. A lo largo de un ciclo menstrual, estas mujeres perdieron 4,8% de su peso corporal y 8% de su grasa corporal total acumulada en el organismo. Sin embargo, estas mediciones volvieron a la normalidad para la mayoría de las mujeres después de 5 días de volver a su dieta normal.