Diario Tribuna en la zona cercana a la estación sarmientina El Ramblón, donde se observó el objeto de color rojo que emano una intensa luz blanca.

“No queda duda que lo que sucedió en El Ramblón fue la aparición de un típico fenómeno OVNI”, reza el titular de DIARIO DE CUYO del 15 de julio de 1978, que se basa en una investigación policial. Tres días antes, el jefe de la estación ferroviaria El Ramblón, ubicada en Sarmiento, justo en el límite con Mendoza, había quedado bajo un objeto volador rojo que emitía una luz blanca tan intensa que lo cegó primero, lo inmovilizó después y terminó dejándolo inconsciente por unas tres horas. Varios kilómetros a la redonda, otras personas observaron desde lejos el fenómeno y hasta observaron cómo las señales de sus radios y televisores se interrumpían inesperadamente.

Aquel 12 de julio, alrededor de las 20,30, Felipe Onofre Orozco, de 33 años, casado, padre de tres hijas y jefe de la estación ferroviaria; se dirigía a recargar con combustible una de las farolas del ferrocarril, una actividad que realizaba cotidianamente. Pero, de golpe, vio una luz muy potente, oyó zumbido extraño y quedó completamente encandilado. Las cosas que llevaba en sus manos comenzaron a caer sin que él pudiera hacer nada. Lo invadió un fuerte olor a azufre y las piernas se le aflojaron. Todo intento de movimiento fue en vano y quedó completamente ciego y sin posibilidad de hablar. Después, cayó inconsciente durante un tiempo imposible de precisar para él pero que, según se calcularon los investigadores, se extendió por unas 3 horas.

Felipe Onofre Orozco, el hombre directamente afectado por aquel extraño fenómeno, cuenta su experiencia.

Cuando comenzó a recuperarse, notó que su nariz sangraba y al alzar su cabeza observó una bola de fuego de gran tamaño que ascendía en el cielo y se perdía tras los cerros. Después, preso de una fuertísima agitación anímica que compartió con su compañera, la perra Diana con el cual convivía en la aislada estación, pidió auxilio a la policía.

Ni bien llegó en ambulancia al Policlínico Ferroviario, donde pasaría 4 días internado por prevención, los médicos hablaron de conmoción psíquica.

Al principio, todos pensaron que aquel hombre había sufrido una alucinación pasajera. Sin embargo, con el paso del tiempo, Orozco pudo contar en detalle todo lo que había sucedido. Y comenzaron a sumarse testimonios de personas que fueron espectadoras del fenómeno lumínico y coincidían con sus descripciones. Así, la teoría de la alucinación fue echada por tierra.

Los espectadores lejanos

José Lorenzo Correa y su familia muestran dónde vieron objeto luminoso.

Mientras Orozco yacía en la estación ubicada en una llanura completamente desértica y cubierta de cactus, algarrobos, retamos y cuevas de quirquinchos; José Lorenzo Correa, encargado de la estancia Santa Ana ubicada cerca del lugar, cenaba junto a su esposa, sus 6 hijos, su suegra y un amigo, Leonardo Bazán. Ya en la sobremesa, el grupo notó que la emisión de la televisión se interrumpió repentinamente. En la pantalla apareció una imagen similar a la de un hongo generado por una explosión atómica, en colores. Pensando que era una falla del canal, cambiaron al 8 de San Juan y después, al 7 de Mendoza, pero la imagen no cambiaba.

Alertados, salieron al patio y allí llegó la sorpresa: observaron a lo lejos el fenómeno luminoso de gran intensidad sobre cuya forma y origen no dieron precisiones.

Mientras tanto, otros vecinos e incluso el sargento Andrés Néstor Oro, personal del puesto de San Carlos, pudieron ver aquella luz entre las 22 de ese día y las 3 del 13 de julio de 1978.

A sus testimonios se sumó el del oficial de la Policía de San Juan que llegó horas después a prestar auxilio al ferroviario. Él también fue testigo ocular de aquel extraño objeto luminoso que lo llenó de incertidumbre.

El contundente informe oficial de la Policía

En medio de la conmoción y de las especulaciones públicas, fue el entonces jefe de la Policía, Juan Voget, quien convocó a los medios para informar los resultados de la profunda investigación, tres días después del extraño episodio que se prolongó por al menos 5 horas: “Estamos en presencia de un objeto extraño, no común ni habitual para los pobladores de la zona”, sentenció.

Y leyó el informe: “Que por las manifestaciones de los testigos ninguno de los declarantes puede establecer el origen de la luminosidad, su forma, tamaño y aspecto físico general del objeto que la produjo.  Que Las interrupciones televisivas y radiales se han producido en distintos aparatos, de distantes lugares, en un radio de varios kilómetros alrededor del lugar de visualización. Que el estudio realizado por Criminalística no encontró en la inspección ocular ningún indicio físico de que la luminosidad u objeto incandescente haya hecho contacto con la superficie de la tierra”.

A la vez, citó que, “el comisario inspector Feliz Alfredo Balmaceda, que llegó junto a otros hombres para auxiliar la jefe de la Estación, pudo ver, casi tres horas después de la primera llamada, un objeto luminoso de color rojo que despedía una luz blanca muy fuerte y alumbraba el campo hacia el Oeste, que dicho objeto se detenía por instantes para reanudar su marcha en distintas direcciones durante unos 15 minutos”.

Las consecuencias

Después de lo ocurrido, Orozco aseguró  a los periodistas de DIARIO DE CUYO que no quería volver a la estación. “Voy a hablar con las autoridades del ferrocarril, porque a pesar de que nunca tuve miedo créanme que la experiencia que viví fue terrible. Siempre me ha gustado salir de noche, en algunas oportunidades en medio de la oscuridad y la soledad he observado cosas extrañas y me acerqué a ellas sin temor. Pero esto es distinto, pediré no trabajar más en El Ramblón”, sentenció.

Por su parte, el profesor especialista en Ovnis, Víctor Corradi, afirmó en ese momento a este Diario que “lo ocurrido en la zona de El Ramblón es, a todas luces, uno de los casos más importantes y significativos desde hace 15 años a esta parte”.

Y agregó: “Tanto el caso Orozco como el caso Correa que conforman la casuística El Ramblón, marcan un hito dentro de la investigación del fenómeno OVNI”.