Uno de los momentos más emotivos vividos en Ushuaia en el acto que encabezó Cristina Fernández de Kirchner fue cuando la presidenta arrojó claveles rojos al mar en homenaje a los caídos en la guerra de Malvinas. Tras caminar unos 200 metros rodeada de gente, que la acompañó al término del acto en el que renovó el reclamo argentino por la soberanía. La presidenta se desplazó desde la plaza Islas Malvinas a orillas del canal del Beagle, junto a la ministra de Defensa Nilda Garré, la gobernadora fueguina, Fabiana Ríos, otros funcionarios y familiares de caídos en la guerra que le agradecieron su aporte a la causa por el reclamo de soberanía.