Oficialmente estiman que en San Juan este año hay más pobres, pero en el gobierno local aseguran que es por la crisis financiera internacional y que está contenida gracias a los planes asistenciales, la mayoría costeados por la Nación. El dato se da en medio de la polémica por la pobreza en la Argentina, que viene de larga data, sustentada por la ausencia o falta de credibilidad de las estadísticas oficiales y por el contrapunto entre la Iglesia y el Gobierno Nacional por las cifras. Este último, acentuado esta semana con el Papa Benedicto XVI, quien pidió que se acabe "el escándalo de la pobreza" en Argentina y por el discurso de ayer del arzobispo de Buenos Aires Jorge Bergoglio (ver página 9).
"Nosotros podríamos decir que tal vez hayamos subido un punto y medio arriba e indigencia y creo que en el caso de pobreza hemos podido subir dos o tres puntos", dijo ayer el ministro de Desarrollo Humano, Daniel Molina. Agregó que "creo que se debe a algunas situaciones que no son ajenas a San Juan, a la crisis financiera internacional. De todas formas me interesa decir que son proyecciones, no son números absolutos, que sólo los puede dar un censo poblacional anual que lo vamos a tener el año que viene".
La proyección para este año, según el funcionario, la están haciendo en San Juan respecto de los últimos datos conocidos de la encuesta permanente de hogares del INDEC, correspondientes al último semestre de 2008, que dicen que en la provincia la pobreza marcó 17,6% y la indigencia 3,3% (ver infografía), lo que llevaría la primera medición ahora a alrededor de un 20% y la segunda a cerca de un 5%. La Iglesia, según mediciones propias de la UCA difundidas por el titular de la Pastoral Social, Jorge Casaretto (quien estará este lunes en San Juan, ver aparte), dice que en Argentina las personas bajo la línea de la pobreza son más de un 40%.
Así, las proyecciones oficiales de San Juan lanzan que este año rompió con la curva de la pobreza e indigencia provinciales, que venía con tendencia en baja.
"Se debe fundamentalmente a la crisis económica internacional, que ha tenido su efecto fundamentalmente sobre aquellas personas que han perdido sus empleos, a partir de la retirada de algunas empresas o de la reducción de personal en algunas que siguen instaladas", aseguró Molina.
"No hay intenciones de nadie del gobierno local o nacional de polemizar sobre lo que opinen los distintos sectores sobre los números. Hoy, cuando tanto se habla de diálogos es bueno escucharnos y sirve para trabajar más profundamente", dijo el funcionario.
"En los momentos de crisis política, siempre sale el debate de la pobreza, pero creo en la preocupación de la Iglesia y de algunos dirigentes políticos sobre el tema. Frente al descrédito de los organismo de medición es difícil hablar, pero hemos generado una serie de políticas para contener y contribuir con planes, programas y proyectos", analizó el ministro.
Molina sostuvo que un indicador claro de la contención de la pobreza es la evolución de la inversión de la Nación en San Juan en planes sociales. En los últimos 15 meses se invirtió el 60% de lo invertido en los 4 años anteriores (junio de 2003-diciembre de 2007 con 446 millones y enero de 2008-marzo de 2009 con 269). Y entre 2003 y 2007 la inversión se incrementó un 482%. Según los datos oficiales en 2003 la inversión social nacional en la provincia fue de 28,5 millones de pesos, en 2007 fue de 165,9 y en 2008-2009 fue de 269,3.