Algunos hasta sacaron los buzos y las camperas. Sin dudas que el de ayer fue el mejor día en toda la temporada para hacer, cubrir y ver ciclismo. Nublado, con una brisa fresca, con los extensos campos cultivados de la zona, el pelotón disfrutó la etapa. Es más, por estas condiciones y porque se corrió en terreno mayoritariamente llano, se registró ayer la etapa más rápida:
Regalo aprovechado. Antes de largar, unos vecinos le regalaron a la caravana un cajón de uva, que poco duró entre los organizadores, comisarios, algunos periodistas y los ciclistas que alcanzaron a probar algunas uvas.
Cosechadores. Como es una zona agrícola, fue común ver a camiones y colectivos transportando a cosechadores en el final de sus jornadas. No obstante, los trabajadores alentaron el paso de la caravana deteniendo los vehículos y sacando algunas fotos con sus celulares.
