Es un ícono de la cultura jachallera y es Monumento Histórico Provincial. Sus paredes de 104 años fueron destruidas con el paso del tiempo y ahora, a 4 años de haber empezado su reconstrucción, la Biblioteca Popular Domingo Faustino Sarmiento empezó a transitar la recta final para volver a ser lo que era. Selva Martínez, una de las arquitectas de UNSJ a cargo de la obra, dijo que a fin de año estará lista.

En la obra de reconstrucción, las paredes fueron levantadas con los adobes que fueron rescatados cuando se hizo la deconstrucción (rescate de las partes para reutilizarlas en la nueva construcción). Pero para hacer que los muros sean más firmes fueron apoyados sobre un cimiento nuevo. Estas paredes tendrán además un revoque especial para que sean seguras. Y es lo que harán en los próximos meses. Para eso colocaron una malla metálica en los adobes. De esta forma las paredes serán más resistentes. A la vez, en la parte superior de ellas se hizo un encadenado para que el techo apoye sobre todo el muro. Antes se apoyaba en algunos sectores y era inestable, según dijo la arquitecta.

Además, según Martínez colocarán el mismo piso (en gran parte) y la carpintería con la que la casona fue construida originalmente. Es por esto que estos elementos del edificio fueron restaurados. Es que el objetivo es que el Monumento Histórico Provincial conserve la forma y fachada original.

Esta reconstrucción se debió hacer porque a mediados de 2005 el paso de los años empezó a pasar factura. Las paredes se agrietaron y había peligro de derrumbe. Y a pesar de que varios sectores del edificio fueron apuntalados, ese mismo año la biblioteca, que se encuentra frente de la plaza departamental, fue clausurada.

En agosto de 2008 la UNSJ, la Provincia, la comuna y las autoridades de la biblioteca firmaron un acuerdo a través del cual se comprometían a la deconstrucción y más tarde a la reconstrucción de la antigua casona de adobe, palos y caña, que albergó durante 97 años la biblioteca más importante de Jáchal. ‘Los adobes fueron clasificados y guardados para la reconstrucción. Hubo algunos que no pudieron reutilizarse así que buscamos en casa antiguas de Jáchal adobes de similares características. Algunos los tuvimos que comprar y otros fueron donados’, dijo Martínez. Y fue por el tiempo que se tardaron en esa búsqueda que la obra se extendió. Sin embargo ahora con todos los materiales listos y con un nuevo convenio con la Municipalidad, que compró los materiales que faltaban, la Biblioteca abrirá nuevamente sus puertas a fin de año’, dijo Martínez.