Una camioneta que circulaba de norte a sur por Ruta 40 no paró de tocar bocina a un auto que transitaba por el lateral de la ruta, en la misma dirección. Esto, a pesar de que este último vehículo tenía la prioridad de paso. Unos minutos más tarde, una moto que intentó salir de calle Corrientes, para dirigirse hacia el centro, casi choca con un auto que estaba saliendo de la rotonda para ingresar a la Avenida de Circunvalación. Estas dos postales son algunas de las que se vieron ayer, y que se repiten a diario, en el Acceso Norte de la Ruta 40. Es que en esta rotonda se juntan varias vías que hacen que la circulación vehicular sea un caos. En horarios pico, por ese sector pasan unos 70 vehículos por minuto y los vecinos de la zona dicen que todos los días hay al menos un choque.

El Acceso Norte de la Ruta 40 es un punto que tiene mucho tránsito vehicular a toda hora. Sobre todo en los horarios pico, pues une Capital con Chimbas y Albardón, entre otros departamentos. Ahí, los bocinazos, las frenadas y los insultos son moneda corriente. Es que hacia el este y el oeste de la rotonda del Acceso Norte, hay 3 vías que se unen en el mismo punto y que hacen que entrar y salir de ese ordenador de tránsito sea una verdadera odisea (ver infografía).

En ese sector, una de las maniobras más complicadas y que por minuto se puede ver muchos autos haciéndola, es salir de la Ruta 40, pasar por el lado oeste de la rotonda e ingresar a Avenida de Circunvalación. Esa maniobra es compleja porque los autos tienen que atravesarse a los que buscan entrar a la rotonda por el lateral de la ruta, a los que intentan salir de calle Corrientes y a los que ya circulan por el mismo ordenador de tránsito. "Esa maniobra es la más difícil de hacer. Los autos quedan atravesados a toda hora, porque nadie respeta las señales de tránsito. Los que salen de la Ruta 40 tienen dos carteles gigantes que dicen Ceda el Paso y no les hacen caso", dijo Luciano Ponce, un vecino del barrio Misiones, que está en esa zona, mientras que otros vecinos del lugar dijeron que esa maniobra se repite en el sector este de la rotonda, cuando los autos que vienen por Avenida Rawson buscan entrar por Corrientes hacia los barrios. 

"Estamos acostumbrados a vivir con el corazón en la boca. Todos los días vemos accidentes de tránsito", dijo Federico Molina, un joven que también vive en la zona y que circula con su moto todos los días por el lugar.

El caos no sólo afecta a los automovilistas. Los peatones también forman parte de este conflicto. Es que en ese sector hay varios supermercados y kioscos que hacen que los vecinos deban atravesar de un lado a otro del Acceso Norte para poder comprar. "Y también están las paradas de colectivo. Hay momentos que podemos estar hasta 15 minutos para poder cruzar la calle", dijo Sergio Muñoz, un vecino, mientras que Abril López, una joven que vive justo en la zona en cuestión, contó que "la calle sólo se puede cruzar corriendo y rogando que no te pase nada, porque nadie respeta las señales de tránsito".

• Camiones y filas

El Acceso Norte de la Ruta 40 es una zona con mucho tránsito pesado. Ahí hay muchos camiones y colectivos que circulan a toda hora. Por momentos, los autos que se detienen en la ruta para dar el paso a los otros hacen que se formen largas filas.