MANANTIALES. La reserva sanjuanina se destaca por tener paisajes que mezclan una gran variedad de colores. El agua, la vegetación y las montañas son una gran atracción que se suma a su enorme valor histórico por el Cruce Sanmartiniano.

Manantiales, en Calingasta, es una de las tantas joyitas naturales que tiene San Juan. Estos campos, que pertenecen al Ejército Argentino, y que es donde los integrantes el RIM 22 realizan diferentes tipos de entrenamiento de montaña, también es un punto que año a año atrae a miles de turistas, debido a su paisaje y sus riquezas. Ahora, esas miles de hectáreas tendrán mayores cuidados y protección. Es que el ministerio de Defensa de la Nación y el de Ambiente y Desarrollo Sostenible firmaron un acuerdo para declarar 5 terrenos del país como Reservas Naturales de la Defensa y entre ellos está Manantiales. Esta nueva declaración significa que en ese espacio se buscará la mayor conservación del ambiente, para poder proteger la flora, la fauna y demás riquezas que tiene, como lo son sus glaciares. "Ahora que se nombró Reserva Natural de la Defensa se va a poder administrar de otra manera y se van a regular todas las actividades turísticas, deportivas y de investigación con el fin de proteger el ecosistema. Se va a hacer un uso racional del espacio", dijo Alejandro Flores, un sanjuanino que forma parte de fundaciones internacionales y nacionales que cuidan el ambiente y que se alegró por este nombramiento.

Manantiales se encuentra a unos 300 kilómetros de la Ciudad de San Juan. En 1982 el RIM 22 comenzó a administrar estas tierras que dos años antes habían sido entregadas a Defensa. Desde ese momento, Manantiales es uno de los lugares más usados para la capacitación en montaña de los soldados que tienen asiento en San Juan. Este lugar, además, es el blanco de muchas actividades recreativas, deportivas y hasta científicas. Y, como si fuera poco, tiene un gran valor histórico, pues por ahí pasaron algunas de las columnas con las que San Martín liberó posteriormente a Chile y Perú. De hecho, es el lugar por donde actualmente y de manera privada se hace el tradicional Cruce de los Andes (ver infografía) y donde durante años se pensó hacer una pista de ski. Estas tierras, que tienen límites naturales como la cordillera de los Andes, Ansilta y el cerro Mercedario, tiene rincones muy ricos como lo es el Arroyo Turquesa, que se caracteriza por su agua cristalina y fresca debido al deshielo que hay en la zona. Es además un lugar muy cotizado a la hora de hacer expediciones de andinistas o amantes de los caballos.

Desde la semana pasada Manantiales es un área protegida de estos ministerios. Según lo que explicaron autoridades nacionales durante un foro en el que se dieron a conocer las nuevas reservas, el Ejército seguirá con sus "actividades de adiestramiento militar" en lo que ellos llaman campos de instrucción. Sin embargo, ahora también Ambiente de la Nación se encargará de defender y preservar la diversidad de flora y fauna que hay en esas zonas. Durante la presentación nacional, en representación de San Juan hablaron Daniela Castro (secretaria de Investigación, Política Industrial y Producción para la Defensa) y el jefe del RIM 22, Rolando Alberto Labrousse. Ambos destacaron las virtudes de Manantiales. "Manantiales es una zona que es muy importante para nuestra provincia. Es clave en el adiestramiento, pero también en la zona por lo que representó la historia de liberación de nuestros pueblos. Es una zona que por la glaciología, los recursos minerales de sus montañas, su flora, su fauna y todo el potencial que tiene, necesita y requiere el fortalecimiento de este tipo de acciones y de este tipo de reservas", dijo Castro. Labrousse resaltó que ellos hacen entrenamientos en la zona en verano y en invierno y que desde siempre buscan cuidar el ecosistema de esta nueva reserva.

Por su parte, Facundo Fernández, de la Dirección de Parques Nacionales, dijo que tanto Manantiales como Uspallata de Mendoza (otra de las nuevas reservas) son un importante reservorio de arqueología y que, además, son las primeras reservas que permitirán el cuidado de los "desiertos de altura" que tienen flora y fauna única en Argentina, y que eso hace que sea urgente conservarlas.


Extensión

382  mil hectáreas aproximadamente tiene Manantiales. Se trata de una importante reserva estratégica de recursos hídricos, pues tiene una gran cantidad de glaciares.

Montañoso

88  kilómetros de montaña tiene Manantiales al recorrerlo de Norte a Sur, formados entre cordillera y precordillera. En estos kilómetros hay varios pasos que conectan con Chile.

Altura

6.800  metros sobre el nivel del mar es la altura máxima de algunos de los picos que hay en Manantiales. Los más bajos miden 2.000 metros. En ellos hay unos 8 refugios.

>> Las otras reservas asignadas en el país

 

Desde el Ministerio de Defensa dijeron que las demás reservas nombradas, junto a Manantiales, son:

* Isla Martín Fierro: esta isla está emplazada en la provincia de Entre Ríos. Tiene una extensión de 211 hectáreas y forma parte de la red de humedales del Delta del Paraná que brinda excepcionales servicios ecosistémicos y culturales.

* Faro Querandí: se trata de un inmueble del Servicio de Hidrografía Nacional apostado a unos 30 kilómetros de distancia de la localidad Villa Gessell, en Buenos Aires. Se constituye en hábitat de numerosas especies de fauna y flora, convirtiéndolo en un reservorio de paisaje, agua, arena, biodiversidad, playas y espacio para el ecoturismo.

* Faro Punta Delgada: se trata de un predio de aproximadamente 559 hectáreas. Está dentro de Península Valdés, en Chubut. Es el hábitat de numerosas especies de fauna terrestre como la mara patagónica. El faro fue librado al servicio en mayo de 1905 por lo que se trata de un Faro Centenario y, al mismo tiempo, es Monumento Histórico Nacional.

* Uspallata: es un campo asignado en uso y administración al Ejército Argentino y está ubicado en la provincia de Mendoza. Tiene una superficie aproximada de 220.000 hectáreas. Dicha Reserva representa las ecorregiones de Altos Andes y de Monte de Sierras y Bolsones cuyo interés para la conservación está determinada por sus valores geológicos e hidrológicos, faunísticos, florísticos y su gran valor cultural.