-¿Qué sensación poseen las empresas metalúrgicas en relación a las tareas de construcción que quedan por realizar en Pascua Lama? -Es una situación un poco compleja. Pero por suerte Saavedra, el Ministro de Minería, nos ha dado su palabra de que todo lo que queda por construirse en el proyecto binacional del lado argentino va a ser todo para las empresas sanjuaninas. Eso es un alivio muy grande, ya que más allá de la desaceleración del proyecto, lo que queda por hacer es mucho, y eso implicaría mucho trabajo para las empresas de la provincia. -¿Existe una derivación de trabajo desde Pascua Lama hacia Gualcamayo por la desaceleración del proyecto binacional? -No, para nada. Este es un caso propio de nuestra empresa que conjuntamente con el sindicato de trabajadores metalúrgicos y la intervención del Ministerio de Minería decidimos que aproximadamente 120 trabajadores de Urbino que habían quedado en stand by en Lama continuarán trabajando y se abocaran a las tareas de construcción, traslado y montaje de la cinta transportadora subterránea de Gualcamayo.
