La primera escena se llevó la ovación de la gente. Sobre el escenario aparecieron María y José, interpretados por dos chicos con síndrome de Down. Y fue el inicio de una puesta en escena donde la integración y la emoción fueron las estrellas principales de la noche. Hasta hubo una intérprete de Lengua de Señas para que todos pudieran disfrutar del momento sin sentirse excluido. Esto es lo que mostró anoche el Belén Viviente que se realizó en el atrio de la Iglesia Catedral, organizado por el municipio de la Capital, con sorpresas que emocionaron al los cientos de espectadores que asistieron al evento.

Como todos los años, los protagonistas principales de la recreación del Nacimiento de Niño Jesús fueron los integrantes del Ballet Sembrando Ilusiones, niños, jóvenes y adultos con discapacidad. Pero, la integración, este año, no sólo estuvo marcada por su participación. En esta ocasión en la puesta en escena también participaron el coro de la iglesia evangelista de Jesucristo de las Santos de los Últimos Días que acompañaron la musicalización del evento. También lo hicieron los adultos mayores que forman parte de los grupos de danza El Fortín, Sembrado Tradición, Alma Cuyana y Remanso Dorado para fomentar la integración y la igualdad, y con un mismo fin: divulgar un mensaje esperanzador en un año marcado por la pandemia bajo el lema "Navidad, esperanza nuestra".

A través de la danza, los cientos de protagonistas fueron recreando cada uno de los momentos más importantes de antes, durante y después del Nacimiento, y con tanto alegría que la gente aplaudió cada escena espontáneamente.

Colorido. El ingreso de los Reyes Magos al escenario le aportó más color a la puesta en escena por el vestuario que lucieron sus protagonistas.

Pero, el momento más emotivo de la noche, y que arrancó alguna lágrima en los presentes, fue el ingreso del Niño Jesús, portado por una de las médicas de Salud Municipal, acompañada por enfermeros, bomberos, monitores urbanos, efectivos de la Policía Comunal y docentes que pertenecen a las diferentes reparticiones municipales, y que fueron presentados como los "héroes" de la pandemia. Y que también se emocionaron hasta las lágrimas cuando, de uno en uno, besaron al Niño Jesús.

La puesta en escena pasó de lo emotivo a la alegría. Fue cuando hicieron su aparición en el escenario los Reyes Magos, al ritmo de una música que expresaba la felicidad por el Nacimiento.

Unas 500 espectadores asistieron a el evento y pudieron disfrutarlo con comodidad. El municipio colocó sillas, especialmente para que usara la gente de la tercera edad. Pero, resultaron pocas por el éxito de la concurrencia. Es por eso que varios niños y jóvenes se sentaron sobre el pavimento para poder observar también cómodamente el Belén.

Alegría. Los chicos que personificaron a los ángeles fueron los encargados de transmitir la alegría y felicidad por el Nacimiento del Niño Jesús.

Y la emoción se hizo presente hasta el último momento. Fue cuando salieron a escena todos los protagonistas que, al ritmo de la música, levantaron los brazos en señal de que hay que seguir luchando sin perder las fuerzas, la esperanza ni la fe en Dios.

 

Sentir solidario

Muchas de las personas que asistieron a la representación del Belén Viviente, llevaron donaciones de alimentos no perecederos que entregaron a Cáritas para que la solidaridad también estuviera presente en el evento. Estas donaciones serán entregadas a diferentes familias carenciadas antes de Navidad.

 

Puesta en escena

200 fueron los artistas que participaron de la puesta en escena del Belén Viviente que se realizó anoche, frente a la Catedral, organizado por el municipio de Capital.