San Juan, 5 de noviembre.- Un ejemplo de honestidad, de esos que no abundan actualmente, se dio en la provincia hace unos días.

Richard Burgoa, empleado del Parque Ischigualasto, encontró una mochila con $37.700 y devolvió hasta el último centavo.

Según trascendió, la coordinadora del contingente de un colegio de Neuquén perdió la plata en las oficinas del lugar y recién notaron que les faltaba al llegar a La Rioja. Allí volvieron y el hombre, no sólo devolvió el dinero, sino que además no quiso aceptar recompensa alguna.