Silvana Bellotti es una enamorada de su infancia y una apasionada por su trabajo terapéutico con chicos. Así lo avala su labor como psicoterapeuta desde hace 25 años, tiempo en el que escuchó sus necesidades y hasta se convirtieron en sus propios maestros, según ella misma cuenta. Todo eso la llevó a escribir y publicar su libro "Hacer clic con los niños" - Editorial Autores de Argentina-, una obra actual que brinda herramientas para el trabajo del terapeuta, los docentes y fundamentalmente para los padres. 


"Empecé realizando terapia individual, y luego me pidieron estar con otros chicos y desde hace 13 años me aboco a la terapia grupal. Mi mayor preocupación siempre fue tratar de acompañarlos, hay niños que la vida les presenta desde pequeños tanto sufrimiento, pero confío en todos los recursos, y si puedo estar ahí para ellos, es lo más hermoso que me puede suceder" , indica la profesional con su positiva mirada de la infancia.


Silvana es psicoterapeuta gestáltica, magister en minoridad y familia, vicepresidenta de la Asociación Gestáltica de San Juan, profesora de la Universidad Católica de Cuyo y profesora invitada de la Universidad de Santa Fe, Méjico, entre otras actividades que avalan su carrera profesional. 


A ella, como a todo el mundo, la pandemia también le presentó desafíos, sobre todo porque durante un período no pudo estar en contacto con aquellos chicos que la necesitaban y ahí fue cuando decidió comunicarse con los padres e iniciar las sesiones virtuales individuales.


"Luego ellos me dijeron ¿Silvana podés hacer algo para que nos encontremos con los chicos del grupo? Y fue así que comenzamos las sesiones grupales on line. En una parte del libro relato en testimonios de sesiones cómo trabajamos", indica la terapeuta.


Claro está que entre las motivaciones que llegaron a consolidar esta obra figura la pandemia, la valoración del trabajo con los niños, la necesidad de compartir su experiencia, sus descubrimientos, entre otros aspectos, incluso la muerte de su secretaria de tan sólo 18 años. " Con Andrea éramos un verdadero equipo en el consultorio, y tuve privilegio de verla antes de partir. En ese momento me pedía que la llevara al consultorio y me preguntaba quién les daba la merienda a los chicos", relata.


Todos estos aspectos la llevaron a trasmitir su experiencia de terapeuta infantil, especialmente para que los adultos revisen la mirada que se tiene respecto de los niños. "Para que tomemos conciencia del cuidado, protección y acompañamiento de la infancia. Los chicos necesitan adultos saludables, porque ellos todavía no se pueden cuidar así mismos. El libro alienta a hacer clic con ellos, que significa que los ayudemos a entrar en sus mundos interiores, para que desde pequeños reconozcan emociones, necesidades, sus recursos y elijan las mejores soluciones para resolver sus vidas lo más saludablemente posible.Todos podemos ayudar a hacer clic a los niños, que significa mayor toma de conciencia de su mundo interior, con la simple pregunta de ¿cómo estás?, ¿cómo te sentís, ¿qué necesitás?", agrega.


Adultos sanos, niños saludables


El libro da varias estrategias para acompañar a los niños a hacer su propio clic. En sus primeras consideraciones sostiene que lo más importante es revisar la mirada que personalmente tiene cada uno respecto de los menores, ya que a partir de ésta es cómo son considerados.


"Primero debemos tener una mirada holística, integral, verlo en su totalidad: que es cuerpo, sensaciones, sentimientos, intelecto, su parte social y espiritual. Y que tenemos que ocuparnos de todas sus dimensiones. Por eso no sólo verlo como un síntoma o dificultad, el niño es mucho más que eso. Pongo mucho énfasis en el trabajo con los sentidos: El niño sano, usa su intelecto adecuadamente, la parte social, entre otros. Por eso en el libro expreso la mirada positiva del chico: que confiemos en la posibilidad de la salud que poseen y que avanzan en el desarrollo de sus potencialidades. Son los adultos los que pueden provocar bloqueos en el crecimiento. Si tenemos adultos sanos, tenemos niños más saludables", asegura Silvana.


Otro concepto que trabaja en el libro es el tema de la frustración. En este sentido explica que, lógicamente los niños necesitan ser criados, educados, necesitan adultos que contengan, pero también que frustren aquellas manipulaciones que impiden el crecimiento. "Este tema de la frustración es muy importante, para que sean adultos fuertes, preparados para la vida", sostiene.


Cambios en la infancia


En uno de los capítulos aborda los cambios en la infancia, ya que este concepto va cambiando, en cada cultura y tiempo histórico. "Muchas veces nos cuesta comprender al niño del presente porque es muy diferente a la infancia propia. En el estudio de este tema, descubrí algunos autores que dicen que el niño de antes tenía características mejores que el del presente. Yo creo que no tenemos que cuestionarnos esto, sino aceptar las realidades de los niños que nos encontramos hoy. Son nuevos desafíos para los que trabajamos con ellos, cómo acompañarlos desde este presente atravesado por la tecnología, los medios de comunicación, los cambios en la familia -padres que tienen dificultades con los límites, y la organización familiar-, la realidad social y ahora una pandemia", acota la especialista. 


Bellotti apunta a que los adultos puedan entender e interesarse por sus modos de divertirse, sus vocabularios, sus pensamientos, la manera de registrar el mundo, por lo que recomienda que hay que detenerse a que los chicos puedan contar con qué juegan, qué adelantos tecnológicos manejan, qué dibujos o series ven, qué música escuchan. 


"Desde pequeños ya no solo dependen de la familia sino de la influencia de la tecnología. Los mayores muchas veces no saben qué apasiona a los chicos. La asimetría adulto-niño se invierte. Estos pueden enseñar temas tecnológicos que aquellos no manejan. En el libro invito a reflexionar sobre estas realidades de cambios sociales y culturales", destaca.


Terapias grupales


Sin duda que la pandemia no podía faltar en un libro tan actual ya que esta etapa puso en jaque a todos sin distinción de edad. Los chicos repentinamente se vieron excedidos de información que no podían procesar, dejar de frecuentarse con familiares, amigos, cambiar la cotidianidad, el modo de aprender -la virtualidad- , los horarios, las rutinas, el uso excesivo de la tecnología, entre otros. Aquí también la terapia grupal jugó un papel importante, sumado a la experiencia de la psicoterapeuta con más de 13 años trabajando en este sentido.


"En el camino por buscar la mejor manera de acompañar a los niños en la terapia, siendo muy consciente de los cambios sociales, culturales e históricos que viven, y tratando de escuchar sus necesidades es que empecé con las terapias grupales. Así fue que me dedique a armar los grupos terapéuticos. Se fue convirtiendo para mí y creo que para ellos también en una experiencia agradable y beneficiosa. Lo que más disfruto es que quieran asistir a terapia, algunos preguntan ¿es una sola vez por semana?", indica.


El libro contiene capítulos más que interesantes para padres, docentes o todo aquel que esté trabajando o en contacto con chicos, en el vínculo que se entabla con ellos, para lo cual, quizá una de las premisas sea, como indica la autora: "encontrar nuestro niño interior, con alguna de sus cualidades y animarnos a ver cómo se puede estar presente en sus vidas" .



Para saber más


Los interesados en adquirir el libro pueden solicitarlo al: 264 571 0400
Por e-mail: gestaltinfantilsbellotti@gmail.com
Precio: 1200 pesos