En enero pasado Suplemento Verde de DIARIO DE CUYO publicó una muy buena noticia relacionada a la firma llamada Compañía Productora de Alimentos para animales, más conocida en Latinoamérica como Forrajero. Subsidiaria de la casa central que está en Chile, comenzó a operar en marzo del 2020 con la elaboración y comercialización de cubos de alfalfa guiados por Fernando Serrano, su gerente, y el destacado emprendedor Nicolás Brizuelas, responsable actualmente de la logística y comercio exterior de este proyecto.

Consultado por cómo comenzaron los contactos con Kuwait, Brizuelas comentó ser "la persona encargada de las relaciones con Medio Oriente desde hace más de 10 años. Sabemos de la demanda en los países árabes de alfalfa de buena calidad, pero existe una gran competencia para proveer megafardos que provienen de USA y España principalmente. Por tal motivo ofrecimos un producto diferenciado como lo es el fardo de compresión doble".

Serrano explicó: "El fardo de compresión doble es de la mitad del tamaño que un fardo normal pero pesa lo mismo, lo cual permite en un contenedor llevar el doble de peso -22 toneladas. Cada fardo pesa aproximadamente 23 kilogramos y mide 38 centímetros de largo".

EN BARCO

Concretar la exportación a estos lugares distantes llevó su tiempo de estudio y una prueba comercial, agrega Brizulea: "La preparación de la carga requiere seleccionar muy bien el tipo de fardo, tanto en calidad como humedad debe rondar el 10%, de lo contrario con tantos días en altamar la humedad ambiente hace estragos en la carga" y agregó, "la carga de prueba, que fueron 78 toneladas, se preparó en 15 días".

Serrano indicó que la primera carga partió del puerto de San Antonio -SA, Chile- ya que los costos portuarios solos representan el 10% de los de Buenos Aires por contenedor", e indicó: "El 'transit time' -tiempo de tránsito- entre SA y Kuwait debido a la pandemia duró 91 días. Pero por lo general ese viaje debe rondar los 58 días".

RESULTADOS

"Tras el arribo a destino, la carga llegó en muy buen estado, con las condiciones requeridas por el cliente. Lo que generó una orden de compra permanente de este tipo de mercadería", explicó el directivo logístico de Forrajero.

Consultado por el destino que le dan a la alfalfa en este mercado, afirmó: "Este tipo de producto tiene como destino la alimentación de caballos y vacas, debido a su fácil manejo".

PROCESO

"Los fardos son seleccionados de productores que tienen un estándar de producción -pureza, color, humedad-, luego se los estaciona 30 días para que sigan perdiendo humedad. Con el 10% de humedad, se pesa uno por uno, para que todos pesen 23 kg. Luego se los introduce en la compresora, desde donde salen comprimidos, y envueltos en una bolsa, con su etiqueta que especifica el origen San Juan, y las características del mismo realizada en laboratorio especializado en alfalfa de Rio IV" comentó Serrano.

"Si bien argentina es hoy uno de los principales productores de alfalfa para exportación, la gran mayoría se produce en megafardos -pesan 750 kilogramos cada uno-, realizados de manera industrial y en gran parte mediante deshidratación. En el caso nuestro, es más artesanal y va a un mercado mucho más específico", indicó Brizuelas.

Y afirmó: "La apertura de este mercado permitirá trabajar con pequeños productores que quieran producir con fardos de calidad y a largo plazo, generando una microeconomía sustentable".

Por este motivo para los directivos de Forrajero, "es muy importante el ingreso al mercado de nuevos productores, la alfalfa tiene una demanda que aún hoy San Juan no puede abastecer".

E indicó: "La alfalfa es un comoditie que es primordial para la alimentación animal y entonces los precios están establecidos internacionalmente por el mercado. Es un producto de mucho volumen y poco peso, lo que hace que en ocasiones el flete sea más caro que la misma mercadería. Por lo tal todo el proceso industrial de Forrajero tiende a reducir volumen, para que en menos espacio podamos transportar más kilogramos y ser más eficientes y competitivos".

VISIÓN

Finalmente indicaron: "Con el tiempo, San Juan se transformará en una plaza de producción de alfalfa de calidad. Estimamos que en los próximos 5 años, contaremos en la provincia con al menos 5 mil hectáreas implantadas, tanto para el consumo interno, la industria y el engorde de ganado".

Para ello, "es muy importante que de apoco el productor tradicional vaya incorporando el uso de tecnología, lo que conlleva a bajar los costos y aumentar la producción, tanto en el uso eficiente del riego, fertilización, fumigación, uso de maquinaria moderna y control de costos".

• Consejos para la siembra del forraje

El cultivo de la alfalfa tiene sus secretos y para conocer estos detalles a tener en cuenta la hora de plantar, Suplemento Verde de DIARIO DE CUYO contactó al ingeniero Luis Kulichevsky, especialista del INTA Pocito, quien destacó que esta es la mejor época para la siembra del alfalfar y enumeró los siguientes consejos: 

PREPARACIÓN

• La mejor fecha de siembra para el Valle del Tulum es durante el mes de marzo y hasta mediados de abril. En las zonas más frías sembrar durante el mes de marzo.
• Sembrar la superficie que se pueda regar, ya que esta temporada habrá una disminución del caudal de riego que erogarán los canales debido a que hay poca reserva en los diques.
• La preparación de suelo debe realizarse de ser posible con subsolador, cincel y rastra de discos y realizar una buena nivelación antes de la siembra.
• No siembre sobre lotes que tengan presencia de Wedelia glauca, conocida en la zona como "chilquilla".

FERTILIZACIÓN

Realice un plan de fertilización preferentemente en base a un análisis de suelo. Antes de la siembra es importante tener buenos niveles de fósforo. A partir del segundo año se debe aplicar nitrógeno con azufre por ejemplo el sulfonitrato o sulfato de amonio. 

• Las cantidades a aplicar varían según los tipos de suelos y la disponibilidad que tenga el lote.

SIEMBRA

• Siembre entre 15 a 18 kilos de semilla por hectárea al voleo para obtener un buen número de plantas que lleguen al momento del segado. En siembras con máquinas se puede disminuir los kilos por hectárea a sembrar, pero tratando de lograr al inicio 200 a 250 plantas por metro cuadrado emergidas.
• El tapado de la semilla no debe ser profundo tratando de sembrar dentro del primer centímetro de profundidad.
• Utilice siempre semillas certificadas y en bolsas cerradas y se aconseja los grupos de latencia 8, 9 o 10 para esta región.

RIESGOS

• Los primeros riegos deben realizarse con mayor frecuencia y poco caudal para evitar el desplazamiento de las semillas.
• El número de riegos entre segados dependerá principalmente del tipo de suelo.
• Una vez que la alfalfa tiene como promedio 2 o 3 hojas verdaderas se puede aplicar herbicidas selectivos respetando siempre las recomendaciones del asesor técnico.

SEGADO

• El segado de la alfalfa se debe realizar con un 10% de floración. Las alfalfas muy florecidas disminuyen la calidad del heno.
• Por temporada para las condiciones del Valle de Tulum se pueden realizar 6 a 7 cortes.
• Rendimientos de 1.000 fardos por hectárea año es factible de lograr con buenos manejos agronómicos.
• En general no se realizan aplicaciones de insecticidas y fungicidas entre cortes.
• Lleve registros de las tareas del cultivo y los costos del mismo y es importante cumplir las buenas prácticas agrícolas para asegurar un producto de calidad cuidando el medioambiente.

LOS ALFALFARES EN NÚMEROS

• 0,10  a U$S 0,11 o entre $8 y $9 cuesta producir el kilo de alfalfa actualmente en la provincia, según el empresario Brizuelas. 
• 1.000  son aproximadamente las hectáreas actualmente cultivadas en la provincia con alfalfa en sus seis oasis.
• 72.000  pesos es el costo de implantación. Incluye costo de semilla, preparación de suelo y fertilización con fósforo.