El municipio de Alcanar, en Tarragona, España, implementará un sistema tecnológico de identificación genética de los excrementos de perros, para poder reconocer y sancionar a los dueños que no los levanten de la vía pública. Los propietarios de las mascotas tienen tres meses para hacer las extracciones de sangre, de manera gratuita, en los centros veterinarios del municipio.

Se hará un registro del perfil genético de cada animal y con la base de datos de los ADN se podrá identificar a qué mascota pertenecen las heces que se encuentren en la calle.

El programa Can-ID, pionero en las Tierras del Ebro, lo desarrolla Vetgenomics, participada por la Universitat Autònoma de Barcelona, y empresa experta en el diagnóstico genético veterinario y la genómica animal.

El alcalde de Alcanar, Joan Roig, señaló que "además de las grandes obras y los equipamientos", uno de los pilares fundamentales del equipo de gobierno ha sido la mejora de la limpieza de la vía pública. Después de un cambio de los contenedores de basura y la instalación de videovigilancia para controlar acciones inapropiadas en las zonas donde están instalados, "se cierra el círculo de acciones de promoción del civismo" en el pueblo con el mecanismo de detección de ADN a través de los excrementos de perro".

Se permitirá identificar "con nombres y apellidos" a los responsables de los excrementos abandonados en las calles y en los parques. "Queremos que los excrementos de perro dejen de ser un problema peatonal y pasen a serlo de los que las dejen allí", apuntó el alcalde. "Había muy poco civismo en Alcanar en este sentido, y nos tenemos que hacer cargo de las necesidades de las mascotas cuando salen a la vía pública, porque esta es de todos".

Las sanciones para los dueños de los perros podrán ser de hasta 700 euros.