El vencedor. Sergio Ziliotto vaticinó que el peronismo ampliará el triunfo de anoche en La Pampa en las presidenciales de octubre.

El peronismo de La Pampa confirmó ampliamente ayer su hegemonía en esa provincia con un rotundo triunfo en las urnas que le garantiza otro período al frente de la Gobernación que lo llevará de la mano de Sergio Ziliotto a completar 40 años ininterrumpidos en el poder. 

Según el escrutinio provisorio, el PJ pampeano le sacaba a Cambiemos, su principal rival en estas elecciones, alrededor de 20 puntos porcentuales de ventaja. 

El justicialismo obtenía anoche alrededor del 52% de los votos para el candidato a gobernador Sergio Ziliotto, contra el 32 % del postulante de Cambiemos, el radical Daniel Kroneberger. Pero también obtenía resonantes triunfos en la capital, Santa Rosa, que estaba en manos de un radical y en General Pico donde por primera vez tendrá de intendente a una mujer -ver notas vinculadas-. 

Los dirigentes que perdieron en ambos distritos reconocieron sus derrotas bastante antes de que se comenzaran a difundir los resultados oficiales.

"Logramos un triunfo contundente en la provincia, recuperamos Santa Rosa y mantenemos la hegemonía en General Pico", afirmó Ziliotto anoche cerca de las 21, cuando brindó una conferencia de prensa. En esa línea, agregó: "Los pampeanos han dado su apoyo y han elegido cuál es el rumbo".

"Los pampeanos siguen eligiendo el camino del peronismo, que significa más dignidad, más inclusión, más ampliación de derechos y más justicia social", sostuvo el dirigente peronista. En esa línea, afirmó que "en La Pampa el futuro es peronista y los pampeanos lo ratificaron".

Cristina llamó anoche al gobernador, Carlos Verna, para felicitarlo.

El peronismo gobierna La Pampa desde 1983 y ayer confirmó su trayectoria provincial como así también el inmejorable momento político que vive el PJ a nivel nacional ya que sumó un nuevo triunfo, el octavo al hilo en el calendario electoral 2019. Y así, Cambiemos volvió a sumar una nueva frustración lo que agudiza la crisis política que abre más dudas que certezas sobre el desempaño que tendrá la alianza oficialista en las elecciones presidenciales del 27 de octubre.

Hasta ahora el peronismo ya ganó las elecciones generales en la provincia de Neuquén, Río Negro y recientemente en Córdoba. También ganó las PASO de Chubut, Entre Ríos, San Juan y Santa Fe. 

El ganador de la noche pampeana es sin dudas el actual gobernador, Carlos Verna, que decidió no presentarse a la reelección por problemas de salud. 

En su posicionamiento político a nivel nacional, Verna se define por su enfrentamiento con la Rosada y por eso se acercó a la expresidenta Cristina Kirchner

El mandatario, un peronista de pura cepa, estuvo alejado del kirchnerismo por mucho tiempo pero en los últimos meses se reconcilió con los K y es uno de los gobernadores que más promueve la unidad del PJ con Cristina Kirchner como la mayor referente del espacio. Hasta se mostró muy satisfecho con la decisión de la expresidenta de nominar a Alberto Fernández como candidato a presidente. Y la flamante candidata a vice en la fórmula de Unidad Ciudadana le retribuyó anoche el acompañamiento político: lo llamó por teléfono para felicitarlo por el triunfo. 

Durante la campaña, Verna buscó a través de los medios incrementar el valor simbólico de la victoria del PJ unificado, con mensajes a Cambiemos y a la interna peronista, pensando en las elecciones presidenciales a pesar que el padrón electoral de la provincia representa sólo el 0,8% del padrón total del país.

El eje del PJ de La Pampa fue exacerbar el triunfo para remarcar una nueva derrota de candidatos del Gobierno, pero el trasfondo del mensaje a Mauricio Macri se debe a la mala relación de Verna con el Presidente, porque considera que el jefe de Estado "favorece" a Mendoza en un tema que cala hondo en los pampeanos como la causa del río Atuel.


 

> La Cámpora ganó la capital, Santa Rosa


El Frente Justicialista Pampeano (Frejupa) triunfó ayer en Santa Rosa con el candidato "camporista" Luciano Di Napoli y recuperó la intendencia hasta ahora conducida por el radical Leandro Altolaguirre (Cambiemos), quien compitió por su reelección y reconoció la derrota a poco de recibir los primeros resultados extraoficiales.

El jefe comunal se hizo cargo de la derrota y evitó responsabilizar al Gobierno nacional por el resultado: "Las urnas son las que hablan y no hay que echarle la culpa a nadie".

Horas antes de conocerse los resultados oficiales Altolaguirre decidió reconocer la derrota a manos de Di Napoli al asegurar que "no hay que alargar la intriga, Luciano (Di Nápoli) se llevó un triunfo muy contundente y supo cosechar la simpatía de los votantes". "Tendremos que analizar con la cabeza más fría, estábamos con ánimo y confianza, pero tendríamos que analizarlo con frialdad", remarcó.